¿Porque estoy aqui? [-Libre-]

Hoy era el primer día que exponían a Carline el cual estaba algo asustado, veía a tanta gente pasar frente a él e intentaba tocarlos pero no podía...pues un extraño vidrio lo impedía. Enfadado como estaba de aquella pared invisible no paraba de dar algunos golpecitos como si estuviera tratando de abrirla...¿¡Porque no podía pasar!? El neko bajo las orejas como si estuviera enfadado y se rindió sentándose frente al vidrio y volviendo a mirar la gente que pasaba por delante suyo, tenía ganas de decirles algo pero nadie se paraba a mirar, algunos le miraban extraño por la escena de antes ''Neko VS Vidrio'' y pasaban de él...¡Era tan frustrante! Encima...no entendía porque le vestían de aquella manera tan atrevida, le habían arrebatado hasta el parche dejando ver su cicatriz en el ojo izquierdo, odiaba con todas sus fuerzas que se viera esa cicatriz pero ahora era inevitable, esa cicatriz sumando a su enfermedad seguro que nadie le compraba...¿Quien querría a un esclavo con esa enfermedad tan inútil? El ojigris suspiró y dejo caer su cuerpo pesadamente en el suelo, estirando los brazos y movía la cola como si estuviese aburrido...y es que lo estaba. El neko dio la vuelta sobre si mismo y quedando la barriga contra el suelo alzó el trasero, después de eso alzó la otra parte del cuerpo sin necesidad de usar las manos demostrando así su flexibilidad.

El tiempo parecía ir a cámara lenta en aquel sitio, era un puro aburrimiento...encima antes de que le expusieran le estuvieron repitiendo cada segundo que tenía que hacer y como se tenía que comportar...pero Carline ya lo había olvidado, lo único que ahora deseaba era salir de esas cuatro paredes, lo único que tenía de entretenimiento que valía la pena según Carline eran sus pendientes que colgaban de su oreja derecha en forma de luna creciente que llevaba desde pequeño y nunca se los había quitado, hasta a veces se olvidaba de que estaban hay colgados y cuando miraba su reflejo en el espejo se acordaba. El neko se revolvió su desordenado cabello y bostezó, le estaba dando sueño tanto aburrimiento. Entonces el ojigris se puso a juguetear con sus dedos, tenía las uñas descuidadas y no se las había pintado desde hace mucho tiempo y extrañaba esos colores tan extravagantes que solía llevar en las manos.

Al propio Carline le resultaba extraño olvidarse de los demás pero no olvidarse de si mismo...bueno...si algún día llegaba a olvidarse de si mismo no tendría importancia. De repente Carline se quedó quieto, dejó de mover sus dedos y parecía no mirar a ningún sitio en concreto...estaba tan quieto como un muerto pero seguía respirando, una vez más le había dado uno de sus ataques de trance que solían durar entre dos minutos y cinco minutos, y cuando el ataque se le pasaba no se acordaba de nada, absolutamente de nada. En ese intervalo de tiempo el neko no veía nada...tan solo una espesa capa blanca, como si la niebla invadiera sus ojos. Por fin Carline parpadeo despertando de su trance y mirando hacia ambos lados..¿Que hacía el aquí? ¿Porque estaba el aquí? quería salir...entonces Carline empezó a dar golpecitos al cristal nuevamente, intentándolo abrir sin exito...se estaba empezando a asustar.

Segia paseando por rozen, ya que mi ultimo intento habia sido un fracaso, me aleje para segir viendo, hasta que algo llamo mi atencion, unos pequeños golpecitos en el vidrio, me di vuelta y torne mi atencion al lugar de donde provenia el sonido y ahi vi a un encantador niño gato, al parecer no noto mi presencia ya que se dio vuelta, poniendose de barriga comenzando a jugar, lo estuve observando por un tiempo para analizarlo bien.

De la nada el se quedo mirando un punto fijo y me anime a hacercarme, segia sin notar mi presencia, como ahora estaba al lado del cristal pude observarlo bien, era bastante lindo, tenia una cicatris en su ojo izquierdo, y en su oreja derecha caia un pendiente en forma de Luna creciente, su ropa era bastante atrevida, pero era lo natural para los esclavos puestos en exibicion, sus orejas y cola se movian de forma delicada y atractiva, luego de observarlo mas de cerca comence a golpear suavemente el vidrio, pero el no mostro ninguna señal de haberme notado, asi que lo ise un poco mas fuerte para llamar su atencion, al parecer lo logre ya que comenzo a mover su cabeza de derecha a izquierda como desentendido, y una vez mas comenzo a golpear el vidrio encantadoramente como si quisiera salir de ese lugar, accion a lo que yo respondi golpeandolo de forma suave, al hacerlo noto mi presencia, mi sonrisa habitual se poso en mi rostro, realmente el habia llamado mi atencion.

-hola, al parecer quieres salir de ahi?- le comenze a hablar poniendo mi voz encantadora, mientras acrecentaba mi sonrisa.

Carline dio un respingo al escuchar una voz masculina hablarle a través del cristal, por fin le habían dejado de ignorar cruelmente y le habían echo caso a sus intentos de atención, claro que quería salir de ese lugar tan..asfixiante, ni siquiera sabía que hacia encerrado en esa especie de cárcel ¿Habría echo algo malo? ¡No! El siempre trataba de portarse bien y no hacer enfadar a los demás...quizá había echo algo malo y no se acordaba como de costumbre. El neko ladeó la cabeza y miró fijamente a aquel hombre que le hablaba y lo primero en que se fijó fue en su largo pelo plateado y brillante, parecía suave y quería tocarlo...pero estaba más que claro que no podía traspasar el cristal.

Soltó un gruñido y agacho un poco las orejas, se estaba empezando a poner de mal humor de estar encerrado sin explicación alguna, suspiró e inspecciono detenidamente a aquel individuo...¿Le ayudaría a salir de su cárcel?- Sí...quiero salir de aquí...- le respondía con voz suave y apoyando la palma de su mano izquierda en el cristal.- Yo..yo no sé que hago aquí.- Al neko le habían estado repitiendo cada día el porque se encontraba en ese lugar, pues claro, se olvidaba por su enfermedad y algunas veces se había llevado alguna que otra bofetada por ser tan estúpido, realmente llegaba a acabar con la paciencia de las personas . En la placa que había en frente de aquella celda ponía toda la información de Carline, su edad, su tipo de sangre y la enfermedad que tenía...y por supuesto su precio, la verdad, mucha gente pasaba de él nada más saber su enfermedad, a muchas personas les frustraba ese tipo de personas que se olvidaban de su nombre.

-¿Me..me ayudas a salir..por favor?- tenía una mirada suplicante, ojala aquel hombre de cabellos como la plata le ayudara a salir de la cárcel de cualquier manera, estaba dispuesto a hacer cualquier cosa con tal de salir de allí y esta era su oportunidad. Movía la cola vigorosamente realmente le había puesto contento que alguien se fijara en él y no le hubiera ignorado.- Me llamo Carline.- se presentó, pensaba que tenía que hacer las cosas bien y presentarse, sería un neko estúpido pero sabía ser educado, por lo menos era eso lo que pensaba.

me quede viendo cada una de sus acciones, el al parecer me inspeccionaba, y sonrei cuando respondio a mi pregunta, al parecer si queria salir, pero me extraño se sobre manera que no supiera que hacia ahi, y repose mis ojos en la plaquita que ahi se encontraba.

Al Parecer tenia una enfermedad, aunque no me gustaba fijarme en los defectos de los demas ni criticarlos por ello.

Comenzo a mover su cola cuando me iso su sigiente pregunta, me encantaria sacarlo de ahi y tenerlo para mi, luego escuche su nombre

-encantado de conocerte Carline, mi nombre es Katare, y... me gustaria ayudarte a salir de este lugar, te gustaria ir a mi hogar con migo- intente saer lo ams agradable posible, al parecer segia confundido

Al escuchar sus palabras una sonrisa se dibujo en su rostro y asintió con un movimiento de la cabeza ¡Bien! ¡Sería libre!-Gracias...- dijo casi en un ronroneo, las orejas las movía con entusiasmo hacia mucho tiempo que no escuchaba unas palabras tan bonitas como aquellas, y si las había escuchado alguna vez no se acordaba.

Ya tenía ganas...muchísimas ganas de salir de aquella celda e ir al hogar de Katare..¿Así se llamaba? seguro que olvidaba el nombre...pero...sería una grosería olvidarse del nombre de quien te había salvado, Carline se prometió a si mismo intentar no olvidarlo, según él las cosas importantes no se podían olvidar, como caminar, hablar, contar números... y ese nombre tendría que recordarlo costase lo que costase. La amabilidad del otro le complacía mucho, le encantaban ese tipo de personas que le comprendían y aun sabiendo su situación le trataban como alguien más y por supuesto odiaba a las personas que le trataban como alguien inferior por esa enfermedad que nunca supo su nombre, bueno sí una vez se lo habían dicho pero obviamente lo había olvidado.

El neko volvió a golpear el cristal suavemente mostrando así las ganas que tenía de salir de esa habitación tan irritante, si fuera él quien diseñara las celdas seguro que las haría mucho más grandes y con ventanas, Carline pensaba que tenían muy mal gusto los arquitectos o sea quien sea que había diseñado la celda.

me sonrei al verlo tan entusiasta, realmente me habia decidido a sacarlo de ese lugar, realmente necesitaba compañia y esta era la oportunidad perfecta, lo quede observando, y el comenzo a golpear nuevamente el cristal para salir, levante un poco mi vista y busque a algun encargado, cuando porfin visualice a uno le hable al lindo neko.

-esperame un poco-

Luego me aleje ante su mirada y fui a hablar con el encargado para que sacaran a carline por que me lo queria llevar, el me llevo hacia la oficina para que sellara el trato, despues de unos cinco minutos volvi donde habia dejado al neko, y pude observar como uno de los multiples encargados del lugar lo sacaba de esa especie de vitrina, mientras que en su mano tenia un pequeño paquete que supuse que serian las cosas de Carline, veia como esperaba impaciente salir, al ver el movimiento frenetico de su cola, me hacerque mas y vi sus ojos llenos de ilucion, o eso es lo que yo crei, tal vez estaba solo alucinando, cuando por fin salio me hacerque a su lado y le acaricie la cabeza.

-Te apeteceria irte?-

mire nuevamente sus ropas, antes de que pudiera decirle nada mas el encargado se hacerco y me entrego el paquete y haciendo una reverencia se retiro, mire curioso el paquete y se me ocurrio una idea

-te gustaria comprarte ropa?

Aunque Katare le hubiera dicho que esperara Carline no pudo evitar asustarse un poco, estaba tardando mucho y quizá hubiera decidido no sacarlo e irse de allá dejando al neko encerrado en la prisión...pero no, a los cinco minutos volvió. Miraba de muy mal humor al encargado que le sacaba de aquella vitrina ¡Lo trataba como si fuera un animal! por tener orejas y cola de gato eso no significaba que fuese como un animal...bueno..puede que un poco si que lo fuera.

El ojigris bajo suavemente sus párpados al sentir la mano de Katare sobre su cabeza...se sentía tan bien cuando alguien te acariciaba, que el recordara era la primera caricia que recibía, claro que eso no era muy seguro contando que hablamos de Carline. Entreabrió sus ojos al escuchar su pregunta y en su cara se formó una sonrisa muy amplia y llena de ilusión.-¡Si! ¡Si si si!- asentía una y otra vez.-Pero..no tengo dinero...- decía en un murmuro y agachando las orejas, de eso si que se acordaba claro...sin dinero no se podían comprar cosas...y entonces no podría comprarse ropa y encima a él la que le gustaba no era nada barata, ir de compras con Carline era un autentico peligro. Instintivamente abrazó a aquel hombre que le había liberado de la prisión, tenía que demostrarle su agradecimiento por haberle sacado de allí, de alguna manera.- Me gustaría agradecerle como es debido el haberme sacado de ese sitio.- le decía separandose de él y mirando al paquete que le habían entregado.-¿Puedo?- preguntaba señalando al paquete que el otro tenía en sus manos.

Sonrei ante su accion, me encantaria comprarle toda la ropa que quisiera, pero me impresiono que me abrazara, pero de todas formas senti una sensacion de calides al sentir su cuerpo junto al mio y le devolvi el abrazo antes de que se separara de mi y me preguntara, en poco tiempo lo pense y le respondi.

-claro que puedes-le pase el sobre y antes de que lo abriera añadi-no te preocupes por agradecerme...y por lo de la ropa, no hay problema yo puedo comprarte ropa a tu gusto, no importa lo que quieras-le sonrei y le bese la frente haciendo que algunos de mis cabellos fueran hacia adelante y taparan mi cara

Tomó el sobre entre sus manos y se ruborizó al sentir los labios del otro posarse sobre su frente, que dulce le había parecido ese gesto. Con otra sonrisa dibujada en la cara por su ofrecimiento de pagarle la ropa abrió el sobre buscando el parche que siempre llevaba en el ojo izquierdo, rápidamente se lo puso y el ojo izquierdo quedo oculto completamente.- No me gusta que se me vea la cicatriz...- comento mientras se ajustaba el parche. El collar que había de bolitas decidió dejarlo donde estaba, ahora mismo con esas ropas de esclavo no se le vería nada bien. Cerró el sobre y se lo dio a Katare.-¿Me lo guardas por favor..?- preguntaba ladeando la cabeza mirándole con su único ojo a la vista.

-En serio...muchas gracias...- volvía a agradecer sonriente. Su mirada se desvió hacia sus propias uñas, eran largas y no se acordaba de la última vez que se las había cuidado, el mismo ya notaba que sus uñas necesitaban una lima y una capa de color por encima. Era un gato taaaan presumido, hasta exagerado en cierto punto. Volvió a fijar su vista en Katare y su mano derecha fue hacia los pendientes que el ojigris portaba en su oreja derecha, como manía suya empezó a toquetearlos, en cierto modo le producían cosquillas.

-¿Sabes? hace tiempo que no como helado...- comentaba medio ido y desviando su mirada hacia un lado.- Y me apetece comprarme unas zapatillas...-suspiró.- Espero que hoy haga buen tiempo.- seguía hablando como medio ido, mostraba otro de sus síntomas de su enfermedad, era incapaz de prolongar una conversación durante mucho tiempo sin hacerse un lio de ideas y empezar de hablar cualquier cosa y que no tenían sentido. Carline volvió a fijar su mirada en Katare y la mano que jugueteaba con los pendientes fue directamente al cabello de Katare y lo acarició con suavidad.- Cuando estaba encerrado en esa especie de escaparate y te vi el cabello me dio rabia verlo y no poder tocarlo.- no paraba de hablar.-¿Vamos?- preguntó al fin ladeando la cabeza y dejando de acariciar el cabello plateado.

fue muy linda su reaccion cuando le bese la frente, y al ponerse el parche se veia igual de encantador, ahora con un toque de mistisismo por saber que habia debajo de ese parche, y al decirme que no le gustara que le vieran la cicatriz lo entendi, era comun en la gente no querer mostrar sus defectos, cuando me extendio el sobre lo tome

-claro que te lo guardo-

tome el bolso que traia siempre conmigo, en donde guardaba mi camara y le ise un espacio, cuando me di vuelta alcance a escuchar como me daba un "gracias", se comenzo a mirar las uñas antes de que volviera a mirarme, y comenzo a tocar el pendiente que salia de su oreja

-te gustaria que te comprase-

le respondi, y luego sin responderme se salto a lo de las zapatillas, para luego volver a mirarme y acariciar mi cabello, sus dedos pasaban por cada hebra de mi cabello plateado, se sentia bien y al escuchar sus palabras sonrei sutilmente.

-vamos-

le tome una mano y lo conduje fuera de ese lugar, como no habia traido mi auto nos fuimos caminando hacia el centro comercial a comprarle ropa a mi nuevo neko.

______cerrado_______

off::Sige en el centro comercial