Visita... a quien? Tatsuya o Richard? (Tatsuya-Richard)

Tatsuya estaba ya listo, antes de que los dos mayores salieran ya esperaba en la puerta principal. Observó como su jefe salía primero de su oficina seguido de Ezekiel, algo había raro en él, ya que estaba un poco muy serio y… ¿decaído?. Tal vez esta vez si se había propasado con sus palabras. ¿Sería que esas palabras realmente lo hicieron sentir mal?, O es que ¿Tan solo era su imaginación? Si tal vez había sido eso. Claramente entre ellos no había tal relación, ni a la que se refirió su jefe. Tan solo habia dicho la verdad...

- ah… - suspiro profundamente, llevándose una de sus manos a sus cabellos para revolvérselos el mismo, este acto le hacia recordar a su viejo maestro el que hubiera y había sido su único padre. Su rostro se torno triste y melancólico, recordar las cosas que vivió en SU propia casa y ahora que su “padre” ya no estaba con él le era mas difícil acercarse a alguien ajeno. Después de todo, desde el día que partió de casa y desde que su padre murió se encontraba a gente que le quería hacer daño y todo era por su completa confianza a las personas. Tal vez esa era la razón o más bien era la razón, por la cual no permitía a Ezekiel o a otra persona tener un acercamiento tan “profundo”. Y de nuevo miro como éstos dos se dirigían directamente hacia el, su jefe con una gran sonrisa y Ezekiel le miraba como si de un padre se tratara.

Ahora lo único que faltaba era ir a la casa de Ezekiel, arreglar su ordenador y salir inmediatamente de su casa ya que en si se sentía incomodo más bien avergonzado que éste le fuera cariñoso o trataba de ser un seductor. Pero lo que si le enfadaba mucho era que se comportara como un completo niño...

Efectivamente, las palabras del menor le habían causado un gran cambio de ánimo, pero no iba a permitir que esa persona lo intimidara de esa manera, podía ser muy infantil pero también era bastante maduro y suficientemente bueno como para manejar esa situación.

Noto como actuaba ante la vista de Richard y después ante él, eso le molestaba un poco y sacaba conclusiones tan rápidas que su mente ya estaba llena de situaciones incomodas para el rubio.

"pues bueno... ¿vamos?" pregunto un poco serio mirando con intriga a Tatsuya y a la vez Ezequiel que le regalaba una enorme sonrisa al menor de los tres.

Exactamente, por su mente pasaba que esos dos tenían mas que una simple relación de Asistente-jefe; no sabia por que le molestaba tanto el hecho que esos dos tuvieran una mejor relación que él, o mas bien no lo quería aceptar y simplemente se mantenía terco ante su respuesta, eso lo sabia perfectamente.

Salio primero de la oficina, dejando atras a su amigo y dirijiendose donde se encontraba, ya listo, Tatsuya; al observar esa sonrisa amable del chico le contesto de la misma manera.

"oh!... ¿no quieres la moto?" pregunto recordando que esa mañana habia llegado en su motocicleta, no iba haber ningun problema ya que le gustaba caminar por las calles de la oscura ciudad.

Permanecio ahí, sonriendole amablemente al chico y debes en cuando volteba a ver a Ezequiel, el cual parecia bastante pensativo y distraido; sabia perfectamente de lo que se trataba asi que sonrio un poco al percatarse que su amigo-hermano se habia enamorado de la persona que menos se lo esperaba.

"me debes una platica" comento sonriendole al rubio.

"Tatsuya... espero y no le tengas miedo a las motos..." le sonrio al joven y le revolvio los cabellos un poco.

"claro que si... me encanta esa motocicleta!" dijo feliz al recordar la ultima vez que la saco sin permiso, lo bueno era que Richard no le daba mucha importancia a eso.

Al observar el gesto del peliverde con el pequeño su corazon le dio un poco, pero que es lo que podia hacer, mas que demostrar su alegria y fingirla como siempre.

"claro que no! por que si no querras subirte a una moto conmigo" rio escandalosamente para despues mirarlo retadoramente y sonreirle abiertamente.

"te gustara lo veras" en su rostro aun permanecia la sonrisa en sus labios sin quitarle la mirada al chico.

No es que no le gustaran las motos, de hecho le llamaban un poco la atención. Pero el solo pensar que podía caerse en ella o tal vez hasta Matarse!!… esta bien debía admitirlo le daban miedo. Nunca se había subido a una por lo mismo.

Sonrío nerviosamente -etto… yo claro que… no… -desvío la mirada. Le molestaba que pusiera esa cara retadoramente y que le sonriera de esa manera. No, no le molestaba le incomodaba, ya ni sabia que pensar de ese sujeto. – Pero prefiero tomar un taxi o algo por el estilo –dijo esto mientras se acomodaba su ropa, tratando de parecer lo más normal y no algo nervioso. Observo a los mayores mirarse entre si, como si algo se trajeran, luego se le vino a la mente sobre su… ¿platica pendiente? A que se refería su jefe, ¿de que tanto habrán hablado mientras el se fue de la oficina? Espera!, en que estaba pensado, que le importaba de que estuvieran hablando… ya le preocupaba que se preocupara de cosas que no tenían nada que ver con él. Miro a Ezekiel aun con esa sonrisa tan amable que siempre le daba, a veces se sentía un poco mal, tal vez, de tratarlo como lo trataba. Pero no podia evitarlo... y no podia evitar lo que le había pasado hace tiempo...

Sonrío al notar un poco de nerviosismo en el ser de Tatsuya, no quiso decir nada pero le era imposible mantener su boca callada cuando se trataba de eso.

"no te preocupes... seré cuidadoso solamente exageraré un poquito..." se comenzó a reír, sabia perfectamente que eso era molesto pero en realidad tenia unas ganas de molestarlo. Además sabía perfectamente la forma en la que manejaba, pero era obvio que si llevaba a otra persona iba a tener más cuidado y no iba a manejar como loco como siempre lo hacía cuando él iba solo en la motocicleta.

"entonces si quiero la moto" sonrió como niño cuando le van a comprar algún juguete.

"te la cuidaré te lo prometo..." sonrió despacio mirando con cara de ojos de borrego a medio morir.

Aquella sonrisa ahí iba de nuevo. Le hervía la sangre el pensar que se burlaba de el, que lo tratara si de un niño se tratase pero la verdad era que él era mas infantil que el mismo Tatsuya. Sonrío con ironía.

-Muy bien –se llevo las manos a los bolsillos y con una sonrisa “amistosa” le dijo:- más le vale por el bien… de los dos – pero más bien se refería que por el bien de Ezekiel, él saliera vivo.

Luego su pose se dirigió a donde su jefe se encontraba, sonriendo como si divertido fuera la actuación de aquel par. Hizo reverencia.
-Me retiro Godwind-san, que pase buenas tardes – se dio la media vuelta, saliendo por completo por la puerta, dejando a los dos mayores ahí. Esperaría afuera, para no estar soportando las acciones de Ezekiel.

"pareces un chamaquito..." le dijo a Ezequiel y le entrego las llaves de la moto, escuchando el comentario de Tatsuya.

"Cuidate..." sonrio al chico que salia de la recepcion, sonrio y se diriguio al rubio.

"tengo una charla pendiente contigo... regresa mañana o ve a mi departamente he?..." le dijo serio, pero en realidad queria saber que es lo que pasa entre ellos dos, no queria que ambos se pelearan y mucho menos que salieran las timados, queria a ambos como si fueran sus hermanos, por que hijos no, era muy joven (xD), y amaba a ambos de la misma manera, aun que tuvieran que trabajar en su negocio.

"anda que te esta esperando... llega a mi casa, ya sea hoy o mañana sale?" le sonrio mientras se retiraba a la cocina en busca de comida rica.

Tomo las llaves, pero antes de que se emocionara le sonrio a Tatasuya y despues se diriguio a su amigo.

"claro claro... te dire todo lo que gustes" sonrio, era obvio que eso no sucederia pero si le diria algo no del todo claro pero si, ademas él aun no tenia esas emociones claras asi que no sabia de lo que estaba hablando del todo bien.

"paso hoy en la noche para regresate la moto..." le sonrio observando las llaves de la motocicleta, si, se encontraba muy emocionada, hace algun tiempo habia estado en ella y le habia quedado muchas ganas de volverse a subir y no habia encontrado la oportunidad de volverla a tener hasta ese dia.

"nos vemos" le sonrio a su amigo para salir del lugar y encontrarse afuera al pelivioleta, le sonrio amablemente.

"pues vamos..." rio un poco y despues se dirigio al estacionamiento. Ahi estaba esa maravilla que tanto le facinaba a quel rubio que parecia un niño con un nuevo juguete.

"anda subete..." le iba a ayudar a subirse y ponerse el casco, no sabia si antes habia montado alguna, pero no se detendria a preguntar, espero que el chico se subiera o le diera algun indicio de que lo ayudara.

Siguieron hasta el estacionamiento, ahí se encontraba esa moto tan preciada para Ezekiel. Le quedo viendo un par de segundos, sabia que era una mala idea. Escucho como este había dicho que subiera a la moto, pero ni loco se subía.
-etto… tenemos que ir a fuerzas aquí? – le miro. – Dame el casco- extendió su mano para que se lo diera... – mmm... preferiría que tu tomaras asiento primero y luego yo… -desvío la mirada de nuevo hacia la moto. La verdad todo esto era incomodo y vergonzoso que Ezekiel le viera uno de sus lados vulnerables.

Esperaría a que el joven rubio tomara asiento primero, seria muy pero muy vergonzoso para Tatsuya que todavía le ayudara a subir a la moto… esta bien que no subiera a una moto tan seguido pero eso no quería decir que no supiera como subirse a una. Tomo su mochila y la paso sobre su espalda ajustándola bien para que no se le pudiera caer en el transcurso a la casa de este. Y así se quedo parado, observando a Ezekiel.

Sonrío ante su comentario; eso le era suficiente para que le ayudara a subirse a la motocicleta y como le pidió le dio el casco para después tomarlo en brazos. Sonrío ante la expresión en el rostro del chico.

"si necesitabas ayuda me hubieras dicho" le sonrío para acomodarlo en el asiento, tomando nuevamente el casco de las manos de Tatsuya y colocárselo, asegurándoselo para que no se saliera de su lugar.

"¿estas listo?" Se subió a la motocicleta y se coloco el casco abrochándoselo; volteo a verlo antes de prender la moto color negro y gris, colores que le agradaban y le fascinaban.

"sostente de mi cintura fuertemente” le sonrió tomándole las manos y colocándoselas en su cintura para que se sostuviera.

"todo listo así vámonos..." encendió la motocicleta esperando que el pelivioleta se acostumbrara al ruido y movimiento de esta.

El contacto que hizo el joven mayor con el le había hecho sentir un escalofrío, y recordó algo que le había sucedido hace mucho tiempo…

-Vamos Tat-chan, no te sucederá nada – le sonría muy amistosamente.
-etto… no, creo que no esta bien… no me gusta… -decía nerviosamente un Tatsuya de no mas de 15 años.
-confía en mi…

La mirada que le dirigió el rubio le hizo salir de sus recuerdos, por dentro estaba molesto, por que se tomo mas de un atrevimiento con él. ¿Pero que es lo que sucedía con Ezekiel?
Solo tenía que aguantarse sino se saldría de sus casillas y le daría con todo, así que no dijo mas, al principio se sorprendió ya que lo había cargado hasta la motocicleta pero el recuerdo que le vino a la mente le interrumpió para decirle algo. Ezekiel tomo las manos de Tatsuya hasta su cintura y entonces entendió de que la motocicleta y ellos ya iban a comenzar a moverse. Inconscientemente, se sujeto fuertemente, y pego su cabeza a la gran espalda del rubio y cerro los ojos, no los abriría para nada, no hasta que llegaran a su destino.

-solo confía en mí...

El cuerpo de Tatsuya lo había notado muy ligero, sabia que estaba delgado pero no tanto, las ropas no permitían admirar bien la estructura de su cuerpo y eso no le había permitido ver la verdadera delgadez del menor, se preocupo pero no dijo nada mejor prosiguió.

Raro, muy raro, demasiado raro, exageradamente raro pero bueno, muy bueno, demasiado bueno, exageradamente bueno para ser realidad, Tatsuya no le había ni reprochado ni un solo movimiento que había hecho y sobre todo ahora se encontraba ahí agarrado fuertemente a su cintura y por supuesto recargado, como si fueran parejas, sobre su espalda; un leve rubor invadió las mejillas de Ezequiel, mejor decidió arrancar su camino y no decir nada ante ese movimiento.

... ¿que es esto, por que me siento así?... se cuestionaba y su corazón comenzó a latir rápidamente y sobre todo se sentía nervioso.

... deja de pensar en pendejadas y sigue el camino... se reprocho así mismo y prosiguió manejando.




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Cerrado