Rió ante la carcajada, parecía ser que esa broma había sido de su agrado, dejando de lado esa carita preocupada que tenía minutos atrás.
-Si es a tu lado… sé que todo estará bien.- comenta, sonrojándose por el beso que le dio.
Cada detalle o muestra de cariño que tenía con el menor era algo muy lindo, algo que atesoraba y guardaba celosamente en sus memorias pues pocas veces se había sentido de esa forma… estaba tan feliz y a la vez nervioso por sus gestos, a los cuales correspondía con agrado y ternura.
Colgándose de su brazo, ambos caminaron por el pasillo del hospital para poder llegar hasta la oficina de Dantés a que recogiera sus cosas y así salir rumbo a su departamento. Mientras Yu esperaba a que terminara sus cosas, llamó a su chofer, quien lo estaba esperando, para que se fuera a casa y es que lo que planeaban hacer quizá sería tan largo como aquella salida que empezó con una caminata por el parque y terminó hasta llegar a la playa.
- Ya está.- comenta saltando hacia el mayor para acariciar su pecho haciéndole especie de circulitos.- Ya llamé para que se retirara mi chofer…. ahora sí estoy disponible para ti.- besa sus labios.