Kail Silence

Nombre: Kail Silence
Edad: 26 años
Cumpleaños: 9 de Febrero
Condición social : Libre
Condición: Hombre
Ocupación: 'Sensei' particular de karate // Dueño de un gimnasio de artes marciales
Inclinación sexual: Suke
Características Físicas: cabello rubio, liso y fino, que le cae sobre la frente desordenadamente. Ojos de un intenso color verde, el hecho más característico de su físico. Labios delgados y nariz recta, porte erguido. Tiene un pequeño arete en la oreja. Su complexión general es atlética, alto y delgado, por fuera parece un joven desgarbado que aparenta menos edad de la que tiene... sin ropa se nota más su musculatura marcada, sobretodo en los abdominales.

Características Psicológicas:Kail es una persona aparentemente callada, seria e insensible, que es incapaz de emocionarse por nada. Parece sumido en una profunda apatía y tiende a aislarse de los demás por voluntad propia, es una persona naturalmente solitaria. Sin embargo, por dentro es alguien que ama la justicia por encima de todo y no tolera los actos inmorales. También tiene tendencia a acumular su enfado en forma de frustración que luego descarga entrenando. No se quiere mucho a sí mismo, pero no dejará verlo con facilidad.

Le gusta: el karate, una afición que tomó del dueño de su 'madre', que se lo permitía hacer y tenía incluso una sala habilitada para ello. El mar, sobretodo en invierno. Es una persona culta, así que le gusta estudiar historia nacional y literatura en sus tiempos libres.

No le gusta: las injusticias, la inmoralidad, dañar por dañar, gente sedienta de sexo que no ve nada más, la mediocridad, el pasotismo, personas hipócritas.

Virtudes: tiene mucho don de la palabra, pese a que no lo demuestre. Si presencia una injusticia, llegará hasta el fondo del asunto para detenerla, aunque tenga que enfrontarse al mismísimo diablo. No quiere reconocerlo, pero los ukes le despiertan mucho instinto protector.

Defectos: ¿Por donde empezar...? Kail es el perfecto modelo de un asocial, incapaz de alterarse por nada, ni por las cosas más pequeñas. Parece que siempre esté congelado en el tiempo, sin emociones ni ambiciones. También puede ser un poco seco para hablar, incluso hiriente, ya que es una persona muy sincera.

Historia: Kail nació hijo de un esclavo y su dueño, así que de ahí procede su condición. Su 'madre' era una persona inestable e irritable, por lo que las palizas a menudo formaban parte de la educación que recibía. Sin embargo su 'padre', un rico empresario que tenía en su posesión a su 'madre', era una persona bondadosa y tranquila; de este modo, siempre que su esclavo se pasaba con las palizas, el propio padre de Kail le detenía y le protegía. De este modo Kail creció odiando a su 'madre' y con un fuerte sentimiento de gratitud hacia su 'padre'.

Su primer amor, y el que lo marcaría para toda la vida, lo tuvo a los dieciséis años. Se trataba de otro esclavo, un hombre procreador, del que cayó perdidamente enamorado por su ternura y dulzura. Mantuvieron una bonita relación a las espaldas de ambos amos durante casi tres años, pero tras ese tiempo ese chico murió. Y no murió por condiciones normales: fue asesinado por su dueño al enterarse de lo que había estado haciendo con Kail.

Kail jamás se ha perdonado aquello y se ha considerado siempre el culpable de la muerte de su único amor. Juró jamás volver a enamorarse y hasta ahora lo ha cumplido. Su dueño, el mismo que también posee a su 'madre', ha muerto hace poco, sin especificar en su testamento a quién entregaba a Kail. Por suerte, Kail sabía que eso terminaría pasando y había ahorrado suficiente dinero para comprar su propia libertad... así que ahí está. Pese a que en sus inicios rozo bastante la miseria, ahora ha empezado a trabajar como profesor particular de karate y se gana bastante bien la vida, incluso ha podido inaugurar su propio gimnasio. Sin embargo, no olvida sus raíces de esclavo y las tiene presentes muy a menudo.

Otros:

·En una ocasión, una paliza de su 'madre' estuvo a punto de matarlo... ese es uno de los motivos por el que su 'padre' le incitó a aprender algún arte marcial; para que fuera más respetado por los demás. Ciertamente surgió efecto; nadie volvió a meterse con él.

·Kail tiene dos formas de descargar su frustración: entrenando karate o violando a su propio esclavo (?).

·Kail no tiene en cuenta los sentimientos de nadie, no ama a nadie, no siente nada por nadie... desde el momento que murió su primer amor. Ahora no es capaz de enamorarse de nadie, y no cree que eso vaya a cambiar nunca.