Una pequeña buhardilla

Detuvo al joven cuando llegaron a una calle estrecha de los suburbios. Pararon frente a un apartamento, no muy grande, de cuatro pisos y una buhardilla. Abrió la puerta del portal y esperó a que llegara el ascensor, ya que eran unas cuantas escaleras.

El ascensor solo llegaba al cuarto y había que subir un poco de escaleras hasta llegar a la buhardilla. Cuando estuvieron frente a la humilde puerta del hogar, abrió y se apartó para dejar entrar a Yvez.

La buhardilla era pequeña, pero acogedora. No había pasillos, nada más entrar estaba el salón-comedor. A la izquierda, una cocina pequeña. A la derecha un dormitorio y al lado de este el cuarto de baño.

-Si te esperabas un palacio lamente haberte decepcionado.-coemntó mientras cerraba la puerta.

Le segui... era un lugar extraño y nuevo para mi... el elebador me habia causado cosquilleos y sonrei.

Cuando llegamos a la casa de Felix sonrei... era modesta pero era muy acojedora... realmente agradable...

"Si te esperabas un palacio lamente haberte decepcionado."

Gire y le vi...

- No esperaba nada de eso... como decirlo... me agrada tu casa no me perdere y es realmente acojedora... es un lugar muy agradable... me gusta mucho...

sonrei animado y pase a conocer el lugar... me sentia tan comodo pero me acorde de sus inquilinos....

- Oye.. y donde estan tus inquilinos...

Le mire sereno pero vi que solo habia una cama... tal vez tenia una pareja... y yo habia mal interpretado.

Sonrió al ver la curiosidad de Yvez y le alegró que le gustara. Sin darse cuenta, se había quedado mirándole y le costó reaccionar ante su pregunat.

-Buena pregunta... tendrían que estar por aquí.-se dirigió hacia la cocina, periéndose tras la puerta.

Al rato salieron dos gatos. Uno negro y otro grisáceo. El negro caminó con la cabeza alta con chulería, hasta u sofá, donde se tumbó. El gris, se detuvo a mirar al chico.

-Por eso te pregunté antes si tenía alergia a los gatos.-dijo, saliendo de la cocina con un gatito pequeñito blanco.

Mire a los mininos y sonrie amplio quiese acariciarlos... uno salio muy altibo hermoso y el otro era lindo... se me quedo mirando y despues vi como Felix tenia otro entre los brazos... no puede evitarlo... y me acerque al que me miraba acarice su orejita... y sedio se pego a mi mano...

- SON... SON LINDISIMOS... YO PENSE... JEJEJE....

Eran muy lindos... segui jugando con el gatito negro...

- Ellos son los inquilinos??

Le mire divertido.... pero el otro me dejo...despues de los mimos se alejo y fue con felix a mirar al otro animalito...

- Son muy lindos... me agradan tus inquilinos

Empece a mimar muy de cercas al peque que enia entre las manos... y despues alce el rostro para ver a Felix... y me estire para darle un beso de agradesimiento, pero se lo di en los labios.

-gracias...

Dejó escapar una risita al ver su reacción. En verdad le gustaban bastante los felinos o por lo menos así parecía demostrarlo. Los gatos también estaban de acuerdo y se dejaban mimar por Yvez.

-Así es. Hasta la fecha no ha habido nadie lo suficientemente paciente para aguantarme, sólo estos tres.-comentó en tono de broma.

Observó con dulzura como acariciaba al minino y su acto le pilló por sorpresa. Parpadeó y al rato sonrió disfrutando la sensación del repentino beso.

-No tienes porqué darlas.-contestó humildemente y le entregó al minino.

Caminó hacia la habitación, bajando de las nubes y pensando cómo se las apañarían para dormir. El sillón no era lo suficientemente cómodo para dormir toda una noche.

-Yvez... ¿te molestaría compartir la cama?-preguntó sonrojándose levemente.

- No entiendo por que no si eres alguien muy amable y agradable...

Sonrei cargando a mininoblanco el cual se dejaba chiquear tan gratamentes se repegaba en el con cariño, lo cual me encato sentia sus ronroneos lindos y su aceptacion.

Le mire coloreado de las mejillas y se colorearon las mias lo mas seguro por que sentia la cara caliente.

- Mmm no... no tengo problemas pero si no te agrada la idea puedo dormir en el sofa o el suelo no tengo problemas...

Jugue con las orejitas del minino... a mi no me daba inconvenientes pero si senti mi corazon acelerar...

- Yo puedo dormir en cualquier lugar...

Sonrei amable...

La cama no era pequeña o por lo menos podían dormir los dos. Serviría hasta que pensase en algo mejor y no permitiría que Yvez durmiera en el suelo.

-Si a tí no te molesta, ni a mí tampoco no hay ningún problema

Se acercó hasta él y le dirigió lentamente hasta el dormitorio. Con cuidado hizo que se sentara en la cama.

-¿Quieres darte un baño antes de ir a dormir?-preguntó amablemente mientras abría un pequeño armario.

-Tal vez te sirvan algunas de mis ropas, o por lo menos hasta que compre algo para tí.-comentó volviéndose y observando al chico.

Tuve que dejar al felino y le segui la cama era comoda me puse a brincar como broma pero no dije nada hasta que me trego las ropas.

- Claro... y no te preocupes...

Mire la ropa y calcule que me quedaria un poquito grande pero era abrigadora y comoda... asi que estaba mas que bien para mi asi que teniendo las ropas empece a quitarme las propias hasta que quede sin una prenda sobre mi cuerpo... solo me cubria con una toalla que me habia dado...

- Donde esta el baño...

sonrei como si nada... al buscar con la vista el baño para limpiar mi cuerpo.

Desvió la mirada cuando se quitó las ropas, bien por educación o por que se sentía ruborizado... tal vez por las dos cosas.

-... el baño... está por aquí...-respondió intentando que no se le quebrase la voz. Se le veía tan lindo con esa toalla... luchó por dejar de pensar en eso y bajó la mirada para no tener tentaciones.

El baño estaba al lado del dormitorio, abrió la puerta y le dijo con un gesto que pasara.

-Te dejo un poco de intimidad. Si quieres algo, tan sólo llámame, estaré en el salón.

Dicho esto se alejó y se sentó en el sillón, sosteniendo al gato negro.

Al parecer el se sintio apenado y no dije nada... solo me cubri mas... y senti que estaba rojo de la cara pero de a poco en poco entre a bañarme, el agua se sentia bien y me sentia comodo, el lugar era lindo y no era frio como Rosen, se sentia bien... y sin mas cuando termine me coloque las ropas... era extraño ponerme esas ropas, eran calidas... ademas olian a el... un momento me deje llevar por ese aroma tan agradable pero despues sali las orpas solo un poco grnades... y sali a verlo estaba en el sofa sentado con el gatito...

- E... estoy listo... el agua estaba rica... y tu ropa me queda bien...

Comente tranquilo caminando con el sonriendole...

- Por cierto lo... lo siento por hacer rato... prometo ser mas ciudadoso al parecer te incomode... pero e.. es la costumbre asi me cambiaba frente a los otros chicos... en rosen...

Acariciaba al gato tranquilamente hasta que escuchó el soinido de la puerta al abrirse y desvió su mirada para verle. Las ropas le quedaban un poco grandes, pero no le sentaban mal... bueno, la verdad no encontraba algo que pudiera sentarle mal.

-No es eso. Es solo que no te había visto así y pues... no era incomodidad, eso te lo aseguro.-sonrió cálidamente y se levantó.

-Bueno... yo también voy a darme un baño. No hace falta que me esperes despierto. Si estás cansado puedes dormir.

Mientras hablaba caminaba de un lado a otro de la cas y al final terminó por meterse en el baño.

Sonrio al escuchar lo que dijo y me quede un ratito con el minino que se quedo dormido en mi regaso... el tardaba mucho en salir del baño... y la ducha y las calidas ropas me tenian un poco adormilado... pero queria esperarlo.. aunque senti que ya no aguantaba... y me dirigi a la cama... el minino se quedo en el sofa y yo termine trepandome en la cama... le espere un poco pero no me di cuenta cuando me quede dormidos... solo recuerdo el rico aroma de las sabanas... olian igual que las ropas... olian a el...

Sin mas me quede dormido tranquilamente... segun yo esperandolo pero no lo consegui...

Tardó un rato debido a que se quedó meditando los sucesos de aquel día. Quien iba a decir que la vida pudiera dar tantos giros. Se alegró de haber tenido la tarde libre y haber entrado a aquel lugar. La próxima vez que viera a su jefe le daría las gracias por haberle dado la tarde libre.

Salió del baño tan solo con unos pantalones, pues siempre dormía así. Observó al gato dormido en el sillón y se dirigió hacia el dormitorio. Yvez estaba tiernamente dormido.

Con cuidado, para no despertarle, se tumbó a su lado y le arropó son las sábanas y le dio un dulce beso en la mejilla.

Estaba levemente encojido, sentia frio... pero sentia el peso en los ojos.. y derrepente ese agradable calor... algo me cubrio y senti la calides de unos labios... no lo pense mucho... tenia frio y me apegue al cuerpo calido...

- Tengo frio...

Entre abrio los ojos, era Felix le sonrei y me apegue a el de modo cuidadoso...

- Estas tibio... dejame estar asi un ratito... tengo frio...

Me sentie comodo abrazado a el y sonrei al verlo y pegarme mas a el... su piel era suabe y su calorsito reconfortante que me hacia estar dio en eso...

También sintió la calidez de su cuerpo y le agradó aquella sensación. Le estrechó entre sus brazos, juntándose más a él.

-Las noches siempre son un poco frías aquí.

Pasó la mano por su cabeza, acariciando sus suaves cabellos. Se recostó más en la cama, permitiendo que el joven descansara sobre su pecho.

-Escuché que dentro de unos días iba a haver una lluvia de estrellas. Podríamos ir a verlas.-sugerió, mientras cerraba lentamente los ojos.

sonrie al momento que me agrazo aunque senti un calor en mi pecho... y un cosquilleo en mi vientre...

- si... si quiero... sera lindo yo nunca he visto como es una lluvia de estrellas...

Me sentia cada vez mas pesado pero me pegue a el recostandome un poco mas en el...

- Oye... si aqui sera siempre asi... no me molestara para nada dormir asi, ademas nunca he compartido la cama con nadie... por cierto... -dudo- por que no me usaste como los demas... en rosen me decian que el que me comprara tendria que hacerlo y yo aceptar... por que tu no?

Esa duda me desperto un poco, el era muy bueno ocn migo y queria saber el por que... era asi y no como le lo habian dicho.

Abrió los ojos ante su comentario y rió. Por mucho que se empeñara, no podía tratar al otro como si fuese un objeto.

-Si con utilizar te refieres a que seas mi juguetito sexual.... no te he usado porque a mí no me gusta forzar a nadie a hacer algo que no quiere. Las cosas se consiguen mejor cuando las dos personas están de acuerdo...

-¿Quieres que te use?-preguntó y sintió como su corazón se aceleraba. Besó levemente su cuello y se incorporó un poco para verle el rostro.

-Eres realmente adorable.-susurró y le besó tranquilamente en los labios.

Le mire, sus comentarios.. suforma de hablar, el como me consideraba... y no me miraba como un objeto mas de la casa me hizo sentir demasiado bien y reconfortante...

buscaba su mirada con los ojos cuando senti como se acerco y me beso el cuello... senti un calor donde el beso... asi como la calides de lso besos sobre mi cara... queria respoderle algo pero no sabia que... se sentia tan bien me sentia tan comodo... no era desagradable para nada...

- yo... mmm...

sentio otra vez esa calides de los labios... y me estremesi por completo... no queria que se terminara se sentia tan bien... me sentia tan comodo con el que no me importaba pero me leje lentamente de el mirandolo a los ojos...

- s... si quiero.. tu dijiste que si ... que si los dos... queriamos... pero... tu ... quieres?...

Le mire...deconocia el color de mi ojo... de seguro violeta... por que aquello se haba sentido mas que bien.

Su ojo había cambiado de color, un color realmente hermoso.

-Por supuesto que quiero...-contestó mirándole dulcemente a los ojos.

Se inclinó y estabe vez le besó con más pasión mientras su mano se deslizaba lentamente por sus hombros hasta el costado. Sintió como subía la temperatura por su cuerpo. Estaba nervioso, pero se sentía bien, era una sensación completamente diferente al miedo que sentía cuando era niño y se quedaba a solas con su maestro.

Le agradaba aquella cercanía y acariciar su cuerpo. Lo que menos sentía ahora era cansancio y su idea de dormir se disipó por su mente. De todas formas, decidió ir despacio.

Senti como sus labios se apresaron mas contra los mios, era aun mas agradable...sentia que mi corazon saldria de mi pecho, pues los calios labios seguian rosando de ese modo contra los mios... senti que me faltaba el aire y lo note cuando respire cada vez mas agitado, pero deseaba continuar...queria... aunque no sabia que hacer, respondi a los besos de modo torpe... y mi cuerpo no terminaba de estremserse ante sus manos que pasaban por cada parte de mi cuerpo...

Todo era calor... un extraño y desesperante calor que no queria que cabara, asi como el beso... pero me sentia mareado... me faltaba el arie y terminer por romper aquel apasionado beso... para tomar aire...

- yo..... haaa.... mmmm....

Sentia que mi corazon saldria de mi pecho, le mire a los ojos... y ante mi ansiedad volvi a buscar sus labios... mis manos tomaron su cara y bese con desesperacion aunque un poco torpe... tratando de besarlo como el lo habia hecho... atrallendolo mas a mi... haciendo que recostara su peso sobre mi...

Sintió la reacción de Yvez y le besó con mas ganas, notando su respiración acelerada. Le encantó aquella pequeña torpeza con la que le devolvía el beso.

Mientras, su mano seguía con las caricias y se coló debajo de la camisa, acariciando la suabe piel de su vientre.

Hubo una pequeña pausa, pero Yvez se le adelantó y sintió sus tiernos besos, como le atraía hacia él y sin darse cuenta se encontró recostado sobre él. Correspondió el beso y se atrevió a meter la lengua entre sus labios, recorroendo su cavidad.

Se apartó un poco para respirar y apoyó su peso en su brazo izquierdo para evitar aplastar al joven. Su corazón latía con fuerza y tenía calor, aunque era un calor bastante reconfortante.

Clavó su mirada en la de él, y le dio una pequeña lamida en su cuello, para luego besarlo.

Todo me estaba envolviendo... el sabor calido de su boca... las caricias... no habia miedo... aunque si nerviosismo, senti su calida lengua entrar en mi boca y me estremesi... no supe como manejar el beso pero el si lo hacia... y me deje llevar... aunque no puede evitar gemir... cuando sus manos tocaron mi piel, eran suabes y calidas... asi como gentiles...

Me miro fijamente... yo me sentia calidamente confundido todo se sentia bien... un hormigue en mi vientre... y ansiedad en mi espalda...

- Qu... que pa...

Pero no pude continuar cerre mis ojos con fuerza al sentir su lengua humeda rosar mi cuello, la piel se me erizo por completo... y senti un pequeño tiron en mi entrepierna.

- ha.. ahi no... mmm!!...

Senti los labios... calientes otra vez y de nuevo ese leve tiron que me hizo gemir... sintiendo mi cuerpo caliente cada vez mas.

Subió hacia su oído, acariciando su mejilla con la suya propia. Cada vez se sentía más exicitado y más al escuchar los gemidos, pero se controló pues no quería estropear el momento.

-Relájate, no tengo intención de ser brusco.-susurró al mismo tiempo que descendía su mano por el vientre de Yvez, cruzando el ombligo y llegando a la parte alta del pantalón.

Acarició sutilmente la entrepierna por encima de la prenda. Volvió a besarle, acariciando sus labios y respirando su aroma. A cada acción sentía como su cuerpo iba estremeciéndose y como su entrepierna iba despertando.

Sus palabras retumbaban en mi mente... desvie el rostro un poco cuando senti ese calido susurro, era una voz que me hacia estar ido, solo podia escuchar eso y nada mas... trate de calmarme... pero mi respiracion no lograba apasiguarse y menos cuando senti esos calidos y suabes dedos correr por mi piel otra vez... donde tocaban senita caliente y hacia latir mas mi corazon...

- si...me....

Mis ojos se abrieron de par en par, senti otro fuerte tiron en mi entrepierna cuando el toco sobre ese lugar... eran suabes caricias que me hacian temblar... levemente mientras mir respiracon se aceleraba de modod descomunal...aferrandome a el... de sus ropas.

Sus labios... eran embriagadores... mas que esa cervesa

- Fe... felix... n... no pares... por favor...

Decia entre cortado entre aquiel calido beso y las manos que toturaban mi parte mas baja... haciendome estremeser y sucumbir a todo lo que el hacia.

Sonrió de medio lado. Aquello se estaba convirtiendo en una exquisita tortura, ya que tenía que controlarse y a la vez no debía detenerse.

-Si tú lo dices, entoces no lo haré.-respondió con un ligero toque de lujuria en su voz.

Volvió a "atacar" su cuello, besándolo y dando alguna pequeña lamida de ve en cuando. Su mano subió, repitiendo el recorrido anterior, pero esta vez llegando a su pecho, acariciando uno de sus pezones.

Se separó un momentó y con cuidado pero de un solo movimiento le quitó la camisa y volvió a recostarse sobre él, rozando su entrepierna con la propia.