Una nueva madriguera para el zorrito ( Otaru)

Aquel beso llego mas lejos, y no le disgustó para nada, prueba de ello era el rojizo carmin tan pronunciado en sus mejillas, y como sus labios y lengua seguían con un compas casi perfecto hacia donde Jean queria que fuese aquel beso.
Cuando este le abrazó sus manos tambien, inmediatamente, se deslizaron por el costado del cuerpo de su amo... de su adorado amo...

"s...si..."
susurró afirmando, ya que juraba que habia susurrado demasiado bajo, al ya no sentir los labios del mayor sobre los suyos, y cuando escuchó la ultimo solo pudo negar efusivamente y apegarse mas, si era posible, al mayor.

"s-si te detienes ahora... m-me quemaré... quiero estar contigo..."
susurró restregando su rostro contra el cuello y una de las claviculas del mayor, aferrandose fuerte a la piel de JEan mientras rogaba por que no se detuviese.

El pequeño parecia ansioso y eso incitaba a Jean a querer más y olvidar su moral que por un momento parecía haberse perdido muy lejos.
Miró a Otaru con una sonrisa, era un chico muy dulce y muy entregado...tal vez demasiado...
Recordó entonces el motivo por el que había ido a Hanori y sacado a Otaru de allí y pensaba que tal vez el menor se comportaba de ese modo porque le habían creado de ese modo , "sumiso, agradable, complaciente" , eran palabras que empezaban a rondar por la cabeza del peliplata en lo que observaba a su esclavo.

Tomó el rostro de Otaru depositando un suave beso en sus labios, aunque le costara un mas que seguro dolor en la entrepierna, por hoy había sido suficiente, su erección disminuiría, la excitación pasaría y podría volver a pensar fríamente.
- Otaru...lo siento- Le dijo acariciandole una mejilla.- Pero no quiero precipitarme en lo que hago...-le decía separandose un poco ,poniendo un poco de jabón en una esponja y deslizarla por los hombros del esclavo con cuidado.- Espero no te molestes conmigo, pero primero quiero conocerte mejor... créeme que no es que no me gustes ni nada de eso.-

Continuaba aseando el cuerpo del esclavo lentamente.- Hoy ha sido un día muy ajetreado para ambos, y mejor será que descansemos...mañana veremos las cosas de otro modo,¿de acuerdo? - le besaba la frente con aire protector, esperando que Otaru no se sintiese rechazado, para él tampoco era plato de buen gusto dejar el tema justo cuando empezaba a calentarse, pero tenía sus buenos motivos para aplazarlo de momento.