En mi soledad, me encogí en el sillón sin responderle, no iba a descubrirlo por mucho que me preguntara, jamás se lo diría por el miedo que tenia, el miedo a una negativa segura, pase mi mano por el cabello soltándolo y abrazando las piernas, mientras mi cabeza se apoyaba en mis rodillas mirando aquella ventana.
-"por mucho que me lo pida no puedo decirle nada lo siento jefe" -.Dije cerrando los ojos, sintiendo que el se iba en ese momento que mas mal me sentía, aunque no me importaba demasiado quedarme solo, ya que es cuando mejor pienso pero también le tengo miedo a la soledad.