Una de esas noches..[Libre]

Todo estaba tranquilo, demasiado tranquilo para un local situado en la Zona 0, y por supuesto, demasiado tranquilo para una persona que llevase en su cuerpo un buen montón de pastillas estimulantes: ese era el caso de Lenin Tenembaum.
El narcotraficante y propietario del negocio, movía la pierna derecha de forma ininterrumpida, siendo el único sonido de la tienda el traqueteo de sus botines de cuero contra el brillante suelo blanco. Había establecido un nuevo uniforme "profesional" en la farmacéutica: unos buenos y resistentes pantalones de cuero negro, un chaleco del mismo material, unido al torso por una buena cantidad de cinturones y una especie de camisa de cirujano...rosa...un grave error producido por su incapacidad de separar la ropa de color de la blanca a la hora de lavar; el uniforme que él consideraba perfecto para evitar apuñalamientos.
Se recostó de nuevo sobre la silla detrás del mostrador, francamente aburrido, y acabó subiendo las piernas encima de la mesa. Bufó de nuevo, y sacó una afiladas tijeras, después de mirarlas un rato, miró fijamente el suelo, recubierto con una especie de lona plateada, las lanzó una vez y se quedaron clavadas un momento, antes de estrellarse en el suelo, mientras Lenny aún notaba la incómoda sensación de viento que habían producido al caer a pocos centímetros de su cabeza.
Sin dudarlo, volvió a recogerlas y tirarlas contra el techo, con idénticos resultados...una y otra vez. Silbó una canción, que cambiaba de tono y ritmo, al ser incapaz de recordar una melodía íntegra, algo más entretenido.

(permiso..)

-coloco las manos en sus caderas, tan amenazador como salvaje era sebastian que casi nadie se atrevia a acercarsele con segundas intenciones, mantenia un cigarrillo en los labios, apagado claro estaba, aunque buscaba el mechero, no tenia ganas de volver a casa, ni siquiera tenia ganas de gana, gruñia a los insensatos que amenazaban con ponerle la mano encima, al fin caminaba tranquilo por la zona cero, la mas peligrosa si bien muchos estaban dispuestos a apuñalar a cualquiera, sebastian juro que no seria el que se quedara atras, mantuvo la mirada ausente en un hombre que tarareaba, y luego se dirigio hacia otro lado, un asiento mugre, apoyado en el muro del hospital cerro los ojos lentamente, hasta que al fin encendio el cigarrillo, y parecia uno mas de aquella zona, quizas lo fuera, no se sabia hasta que pareciera lo contrario, coloco una sonrisa debil en su boca no era ni sonrisa, solo una mueca, y se sento apoyado, en esa pared, su figura, parecia afeminada aun cuando tenia una figura atletica y masculina su cintura decia lo contrario, su ropa era nada mas que unos pantalones y una camisa blanca que pendia semi-abierta-

[Off topic: bienvenido ^^]

Cinco minutos eran demasiado tiempo para mantener entretenido a una persona con tal colocón y maraña mental, así que inexplicablemente las tijeras acabaron dentro de un gato con el que quería experimentar y él siguiendo al gato, herido, que corría como un loco hacia la entrada.
El felino se coló con facilidad por una rendija de la puerta entreabierta, y él se quedó allí, amenzando entrecortadamente y a gritos al felino que se alejaba entre las sombras como alma lleva el diablo, con el filo brillante firmemente clavado en el lomo.
En cuanto el animal se hubo alejado, se fijó en el hombre que estaba sentado en el muro fumandose un cigarro, lo miró distraido:
-...espero que lo hayas leído...-murmuró señalando al cartel que pendía en la puerta -...no somos...ya sabes...eso- acabó, incapaz de recordar lo que quería decir, así que se dedicó un momento a ver si volvía aquel maldito gato-...¿te sobra...un cigarrillo...?...no...recuerdo...donde perdí...el último cartón...

-realmente estaba distraido aunque por su humor no respondio nada, su orgullo parecia responder a gritos, por si acaso "le habia insultado" pero quien demonios se tomaria eso como un insulto, saco una cajetilla de cigarrillos, entregandoselo- Soy un cliente normal...o solo paseaba por aqui. si, paseaba -arqueo una ceja cuando le observo "pasear" era lo que menos haria una persona por esa zona y ante todo en aquella zona tan peligrosa, quien podria pasear tranquilo o incluso quien, en su maldita ignorancia lo haria. Suspiro, y luego volteo su mirada hacia el cuando coloco la mano en el bolsillo y murmuro distraido- donde estoy, ciertamente no me fije mucho cuando estaba caminando -encogio los hombros, los cabellos negros rozaban cada zona de su rostro, no muy moreno pero tampoco demasiado palido, dirigio su mirada hacia arriba, el techo, habia salido del hospital donde trabajaba y bueno habia tenido una especie de pelea por su "duro" caracter- sebastian...-alzo de pronto la mano mirando al otro-

-...lenin..."lenny"- murmuró mientras estrechaba la mano del otro, se alejó un poco y se sentó encima cómodamente en el suelo, con las piernas cruzadas. En vez de encender el cigarrillo y empezar a fumar, lo deshizo y se dedicó a liarlo con otro papel y otros ingredientes: nada mejor que un porro para calmar los ánimos. Si no hubiera tenido tabaco, posiblemente hubiera vuelto a por otras tijeras y habría intentado matar al hombre allí mismo. Era cada vez más difícil encontrar buenos especímenes.

-...estas en la...Zona 0...en concreto...delante de mi negocio...¿hospital?, entonces...¿médico?...si buscas alguna sustancia entretenida...para pasar el rato...soy el mago de los estimulantes... y la morfina...entre...otros

Soy enfemero no busco ninguna sustancia, las hago yo mismo en cuanto puedo -susurro algo brusco no obstante, sabia que estaba en la zona 0 no era ni un imbecil, ni nada parecido, coloco las manos en los cabellos o al menos una de ellas mientras susjetaba con los dientes el cigarrillo, le habia aprecido interesante quizas por eso sus piernas habian acudido a ese lugar..coloco leve las manos en las rodillas de manera que su cuerpo recibiciera el calor, el calor necesario ya que de nuevo estaba semi-recostado, no sentado del todo por si el otro "se quejaba" de nuevo..arqueo una ceja al ver que tan calmado se hacia un porro, nunca lo habia probado..se acerco parsimonioso para dejar la nariz justo en el humo, normalmente lo hacia, aunque el olor fuera demasiado fuerte..- vaya -susurro cuando continuo consu cigarrillo dirigiendo la mirada a su alrededor-

Se encogió de hombros cuando el otro denegó la oferta y pasó la lengua por el papel del porro, cerrándolo y encendiéndolo.
-El tabaco...reduce...la...fertilidad...en...un 76´964 %...-murmuró, sin acordarse de donde había sacado aquello. Lenny también fumaba, pero le iban más otras sustancias y no deseaba para nada dejar descendencia-...soy...cirujano...-comentó, como si sólo por esa frase el otro tuviera que entender que tenía razón.
Notó que el hombre estaba oliendo el humo del porro, sin entender muy bien por qué lo hacía:
-...huele...a porro...-murmuró enconjiéndose de hombros.
Volvió a mirar al cielo, y soltó una bocanada de humo:
-....entonces...¿por...qué....estás...aquí? -observó de manera demasiado interesada el cuerpo del otro - ...si...quieres...suicidarte...no me importaría...quedarme...con...tus órganos...

-sebastian permanecia calladoobservando las incongruencias mencionadas por el otro, arqueó entonces una ceja a modo de intentar entender lo que decía aun asi sin poder conseguirlo, por lo que simplemente parpadeo y coloco la mano trás la nuca, dirigiendo su mirada a los ojos de lenny- no, no me interesa el suicidio, pero si muero ya se a quien ceder los organos -murmuro cuando dirigio una mirada hacia sus zapatos y luego suspiró, nad hacia ahí pero nada le renetía tampoco en la calle y no sabia que hacer, por ahora su mente parecia un caos, asi que se sento y cruzo las piernas dirigiendo una mirada hacia arriba, para cerrar los ojos y amoldar sus manos en los cabellos, los cuales cedian como vil seda entre sus dedos- ¿Trabajas aqui?

-soy...el dueño..., supongo..que...me va bien...siempre quise...drogar gente...y poder...drogarme...más..a su costa...y me gusta...la intranquilidad...de...los barrios malos...y los sitios...cutres...-murmuró, encogiéndose de hombros, y echando un par de caladas al porro-..y el...flamenco...queda bien...en la entrada...es..una ...antigüedad....de la época...colonial....¿y cuál...es...tu excusa...para andar por...aquí...si no buscas...droga...o que te maten...¿te has...metido...en un lío...del que no puedes salir..., peleas...con tu chico...o simplemente...te va lo...peligroso...?

-asi que todo se resumía en que era un drogadicto que queria experimentar y todas esas malditas idioteces. no quiso exponer sus pensamientos, sebastian en cambio aparto distraido algunos mechones de su cabello, se recostó entonces en una de las paredes que alli habian, ahora no sabia si el tipo se habia drogado o solo fingia incontinencia verbal, ¿incontinencia? ni sabia que era, ni sabía porque había dicho eso. sus ojos volvieron a ofrecer una vision inexpresiva- simplemente quise venir solo -mentira, no, no queria exponer a julien, si pasaba algo pasaría pero le hizo gracia ¿matarle? quien tocara a sebastian, tendria la suerte de salir vivo-

-¿...quieres....ver el ...sotano...?- preguntó de manera seductora, con un aire confiado y natural, pensando lo bien que le vendría a sus experimentos y vida sexual el joven que tenía enfrente-...es peligroso...quedarse...en esta...zona...tan solito..., ninguno...se atreve...a venir..por aquí...y soy una...escelente...compañía