Casa de Arthur(Miku)

Su rostro se ilumino cuando escucho la respuesta de su amo.

- Helado, si me gusta, me gusta. – vio llegar a Arthur con las copas y todo lo demás. – Es de fresa? Me gusta, pero Amo-chan, la próxima que sea de chocolate si? – le dijo guiñándole el ojo. – Amo-chan. – Miku se acerco al rostro del chico mirando a sus labios directamente, luego miro a Arthur a los ojos y se acerco lentamente con la lengua fuera de su boca. Termino lamiendo los labios de su amo por un lado para quitarle el poco helado que se le resbalaba.

- Sabe rico con helado Amo-chan, me deja ponerle mas? – no espero a que su dueño se lo permitiera, el simplemente tomo el helado con su dedito y lo embarro en la boca de Arthur, que luego se puso a lamer.

- Esta bien, comprare de chocolate la proxima si ese es que te gusta- sonrio y lo anoto en su lista mental de compras.

Su rostro enrojecio en un tomo muy intenso sentir las lenguita de Miku lamiendo sus labios, sintiendo sobre ellos un dulsor no antes conocido.

Trato de alejarse un poco cuando escucho la pregunta de Miku pero no lo hizo a tiempo como para no dejarse embarrar por Miku y lamer de nuevo sintiendo de nuevo aquel dulsor que era aun mas dulce que cualquier helado que hubiera probado antes.

- eres injusto!- reclamo un poco e hizo lo mismo que Miku pero despues de sentir le sabor de sus labios no se pudo contener y junto sus labios con los suyos probando tanto aquellos labios como aquella dulce lenguita que antes lo habia saboreado.

Se sorprendió mucho cuando su amo le dijo aquellas palabras, ¿Estaría enojado? Justo al instante sintió el dulce del helado tocar sus labios y después la lengua de su amo sobre ellos, pero las cosas no se quedaron así, en un momento sorpresivo para el la lengua de su amo irrumpió dentro de su boca y lo saboreo de una forma que Miku desconocía. El nekito no pudo hacer otra cosa que mover torpemente su lengua junto con la de su amo, eso era nuevo para el, pero igual lo intento. El pequeño le agarro gusto a lo que hacían y abraso el cuello de su amo para no soltarse.

Sobareo la boca del neko con suavidad acariciando suavemente su paladar mientras degustaba tanto su boquita como delicadesa saboreando cada rincon de su boca, no queriendo separarse de aquel dulce manjar pero teniendo que hacerlo que ya no podia continuar por la falta de aire.

Al separarse tomo en cuenta de lo que acaba de hacer, sintiendo algo de verguenza de si mismo porque sentia que se habia aprovechado de la inocencia del neko y aun mas porque aquello le gusto mucho.
- lo siento- dijo escondiendo un poco su cara sonrojada.

- ¿Porque se disculpa Amo-chan? ¿Lo que hizo es algo malo? – lo miro inocente buscando los ojos de su amo pero eso fue en vano, ya que este se encontraba con el rostro oculto. - En Hanori dijeron que esto era normal que ocurriese, esto y otras cosas, pero si para mi Amo-chan es algo malo, entonces yo soy un neko malo porque me gusto. Perdóneme Amo-chan. – serró los ojos y con las mejillas sonrojadas agacho la cabeza sinceramente apenado por su falta. Arthur había sido muy amable con el, lo que menos quería Miku era que se molestara, curiosamente el nekito en su ingenuidad había hecho muchas otras cosas incorrectas.

Levanto el rostro un poco al escuchar las palabras de Miku viendo lo afligido que estaba al creer haber hecho algo malo.

- no, Miku es un buen neko...no hizo nada malo- levanto el rostro del neko para que viera que no estaba enojado con el.

- no tengo nada que perdonar porque...a mi tambien me gusto- dijo mirandole a los ojos con un tono carmin en las mejillas. Se sentia algo culpable por la inocencia del pequeño, no queria provecharse de el pero quizas no tenia que preocuparse despues de todo solo habia sido un beso aunque habia sido el beso mas sabroso de su vida por lo cual sabia que tendria que hacer muchos esfuerzos para no besarlo de nuevo.

- Amo-chan!! – se sintió muy feliz de que su amo no estuviera enojado y sin pensarlo se lanzó hacia el abrazándolo del cuello, lo cual provoco que la silla se balanceara vertiginosamente y finalmente cayera con todo y Arthur y Miku.

- Mia… - levanto la cabeza el nekito para mirar a su amo. - Amo-chan esta bien? – Fue lo último que alcanzó a decir antes de sentir como el frío helado de la copa que caía de la mesa se resbalaba por su espalda desnuda. – Ñia!! Esta helado… y pegajoso. Ashu!!

Abrazo a Miku sin darse cuenta que la silla empezaba a tambalear hasta verse que fue demasiado tarde para evitar la caida pero no muy tarde para amortiguarla.

Al escuchar la pregunta de Miku, Arthur sonrio a pesar del dolor que sentia, algo aliviado de que al menos Miku no se hubiese golpeado.

-estoy bien...no fue nada- sonrio aun abrazado al gatito para luego mostrarse una ligera mueca de confusion al escuchar a Miku, deslisando sin querer el lugar donde el helado habia caido.

Sus dedos jugaron por unos segundos casi inconcientemente con aquella sustancia que se encontraba sobre aquella suave piel, sus dedos recorriron suavemente aquella espalda explorandola como queriendo conocer la extension de esta callendo en cuenta de lo que hacia solo cuando sus dedos fueron separados de aquella piel por la ropa del neko. Paro los movimientos de sus manos dandose cuenta de lo que hacia como quien despierta subitamente de un dulce sueño.

Separo sus manos de la piel del neko separandose tambien de el quizas temiendo que sus hormonas terminaran llevandolo a lastimar al gatito.

- creo que sera mejor que te des un baño, te puedes resfriar- le dijo algo avergonzado de su actitud, el no actuaba normalmente asi pero Miku tenia algo extraño algo que le atraia y a la vez alteraba, algo que realmente no entendia que era pero le hacia tener un poco miedo de si mismo.

El calor de las manos de Arthur alivió ligeramente el frío del helado. Miku se quedo quieto mientras su amo deslizaba sus dedos por su piel, era una sensación agradable para el neko recibir las caricias tan suaves de su amo que se perdió momentáneamente en esas sensaciones y le pareció muy extraño cuando súbitamente Arthur se detuvo.

Un baño? El savia que las personas libres disfrutaban de ricos baños con agua caliente y burbujas. En Hanori no había muchos lujos para los esclavos y su rutina de aseo era bastante simple. La carita del neko cambio a una de felicidad y con su seductora inocencia miro a Arthur muy de cerca para preguntarle.

- Amo-chan se bañara conmigo? – meneo la cola sinuosamente y enseguida tomo la mano que Arthur había usado para acariciarlo y le io una lamida a sus dedos, que después metió en su boca y siguió lamiendo para quitarle el dulce a su amo.

Mira confuso al escuchar lo que Miku le decia le pregunto, la respuesta logica era no pero no queria decirlo de forma que Miku lo viera como algo malo asi que trato de buscar una escusa pero estado aun lejos de encontrar una se toco con la vision de Miku relamiendo sus dedos y sus ojitos que parecian suplicar la aceptacion de el.

- si me bañare contigo- respondio algo resignado mientras se cuestionaba a si mismo como haria para soportar la tentacion durante el baño.

Movio la cabeza, no debia pensar en Miku como una tentacion, Miku era un nekito lindo y tenia que cuidarlo. No debia pensar en cosas pervertidas de el como estaba empezando a hacer. Ademas solo era un baño, nada mas.

Arthur cargó al neko y lo llevo al cuarto de baño dejandolo a un costado de la bañera mientras alistaba un baño de burbujas.
- ahora puedes meterte pero...tienes que quitarte la ropa- dijo al terminar de preparar el baño tornandose sus mejillas de un color rojo encendido al decir la ultima parte desviando la mirada para no mirar a miku mientras se quitara la ropa.

Miku jugaba con los cabellos de Arthur mientras lo cargaba al baño y finalmente lo dejaba al lado de la bañera. Como niño travieso se tocaba el helado embarrado en su cuerpo y aunque la sensación era desagradable y pegajosa, no paraba de hacerlo, al menos eso lo entretenía mientras Arthur preparaba el baño de burbujas; ya algo aburrido de su piel pegajosa, se acercó al lavamanos y se miro en el espejo comenzando a hacer caras y parando la boquita para besar el reflejo y reírse de su travesura.

Escucho a su amo después de que este terminara de prepararle el baño.

- Si amo chan. – dijo y sin más se bajo los pequeños shorts rosados con todo y ropa interior bajándose las medias al mismo tiempo. – Ya estoy listo amo-chan, falta usted. – dijo sonriendo sin ningún pudor.

- metete a la bañare- le dijo como dandole una orden pero con una voz calmada hablando sin voltear a mirarlo esperando que no lo viera desvestirse y obedeciera lo que le dijo.

Se quito la ropa lentamente, primero el abrigo, luego la camisa que llevaba, despues los pantalones y la ropa interior, y por ultimo sus lentes dejando toda su ropa a un costado para luego voltear y para dirigirse a la bañera donde debia estar Miku.

Obedientemente no vacilo en introducir uno de sus piecitos en la bañera para calcular la temperatura del agua, y ya bien seguro de que era adecuada introdujo su otro pie y se sentó en el agua para jugar con la espuma. Disimuladamente volteo para ver que hacia su amo y se encontró con el cuerpo desnudo del mismo, lo cual le provoco un leve sonrojo y rápidamente aparto la vista, hasta que sintió como Arthur entraba en la tina junto a el.

- Amo-chan, mire. – lo llamo sonriente y le mostró su cabeza llena de espuma que lo hacia parecer como cubierto de betún, solo le faltaba la cereza enzima.

- jaja- rio al ver a Miku cubierto totalmente de espuma

- pareces un lindo helado…casi hasta dan ganas de probarte- dijo sin pensar mirando luego de reojo a Miku y recordando como se encontraban los dos. Movio la cabeza ligeramente como para tratar de alejar aquellos pensamientos nada santos que pasaban por su mente, desviando la mirada para no imaginar que solo aquella espuma que hacia ver lindo a Miku era lo que lo separaba del cuerpo del neko.

Sonrió por el comentario de su amo y luego soplo algo de espuma que le había caído a la nariz.

- Mmm… - se quedo pensativo tocándose una mejilla con su dedo y mirando a Arthur; después se acerco a él y con sus dos manos le puso una corona de espuma sobre la cabeza. – Ahora amo-chan también se ve delicioso. – se rio y abrazo a su amo con cariño. – Amo-chan, desea que le talle la espalda? – pregunto después de separarse de él y tomar la esponja entre sus manos.

Rio al verse cubierto totalmente de espuma y escuchar las palabras de Miku desvaneciendose casi instantaneamente aquellas idea raras que pasaban por su mente ante aquel acto tan inocente.

Penso un momento la propuesta de Miku, dandose cuenta de algo si estaba de espaldas no veria a Miku y podria contener aquellos no muy puros pensamientos hacia el neko.
- haslo pero con cuidado- le dijo y se puso de espalda a el para que Miku pudiera tallarlo.

Se aparto un poco dándole espacio a su amo para que se acomodara en la tina y le mostrara la espalda. Una vez se quedo en la posición adecuada Miku le paso la mano mojada por la espalda y luego metió la esponja dentro de la tina y la exprimió sobre la piel blanca de su amo, empezándolo a frotar con cuidado para que pudiera relajarse y disfrutar del baño.

- ¿Lo está disfrutando amo-chan? Dígame ¿Lo hago bien? – continuo tallándole la espalda; quería hacerlo bien para que su amo estuviera contento con él.

Sintio el suave contacto de la esponja con su piel provocandole una serie de caricias sobre esta sintiendose totalmente relajado al sentirlas.

- si lo haces bien, se siente bien- sonrio y cerro los ojos como queriendo sentir mas de aquel suave contacto.

- no me habian bañado desde que era pequeñito...se siente algo raro- comento, en realidad si se sentia raro, extrañamente placentero.

Sonrió feliz de que sus esfuerzos fueran agradecidos. Volvió a sumergir la esponja dejando caer el líquido sobre la espalda suave de su amo; disfrutaba mucho el poder complacer a su amo en cosas como estas, lo mínimo que pudiera hacer por su adorable amo él lo haría.

- Amo-chan yo voy a cuidar de usted y a atenderlo como es debido, se lo prometo. – abrazo su espalda dejando reposar su cabeza sobre esta y sin pensarlo le dio una pequeña lamidita felina y comenzó a ronronear.

- eres muy lindo…- dijo al escuchar las palabras de Miku, iba a agregar algo mas pero sus palabras fueron detenidas repentinamente por la lamida del gatito sobre su espalda, sorprendiéndose primero y haciendo que sus mejillas se tiñeran de rojo pero sonriendo al escuchar los ronroneos de Miku.

- ¿eres feliz?- pregunto a pesar de saber bien la respuesta a su pregunta, el también era feliz. La ternura de neko hacia sentir bien, sentía casi como si el neko compensara con ella todo el cariño que le había faltado durante su vida.

Detuvo sus lamidas al escuchar la voz de su amo. ¿Feliz? Que rara pregunta le hacia el amo-chan.

- Si amo-chan, yo soy feliz, porque al fin salí de Hanori, que era muy aburrida, y ahora estoy con mi amo-chan que me consiente y me da helado. – sonrió diciendo esto. – ¿Porque lo pregunta amo-chan? ¿Usted es feliz? Si no, no dude en decirme como lo puedo hacer feliz, yo quiero que sea feliz amo-chan. – lo abrazo con cariño tratando de darle todo su calor. Un poco de espuma se acerco a su nariz, lo que provoco que le nekito respingara – Ashuuuuu!! – el gatito estornudo de repente. – Perdón. – se disculpó con sus mejillas rojas y abanicando una vez sus orejas.

- no tienes que hacer nada, ya me haces feliz que me quieras hacer feliz- le dijo sin saber si le neko le entendería o no aquello, mientras sentía la calidez del cuerpo del neko, pasando sus manos sobre sus espalda estrechando también su cuerpo con el del neko.

- Salud- le respondió limpiándole la espuma con una de sus manos aun abrazando al nekito poco unos instantes pero deshizo el abrazo al darse cuenta de lo agradable que era esa sensación.

- tenemos que terminar el baño o te resfriaras- acariciando sus orejitas pero soltando el cuerpo del neko mientras que trataba de alejar aquellos nada puros pensamientos que rondaban su cabeza.

El dedo de Arthur roso la nariz de Miku al quitarle la espuma, para el nekito fue como una caricia tierna de su amo. Algo de lo que había dicho pudo entender, aunque la forma de decirlo fue un poco enredosa el concepto si permaneció entendible para Miku.

La colita del neko se movía sinuosamente, estaba muy feliz entre los brazos de su amo, era muy cálido estar allí y sentía pena de tener que retirarse, pero sin embargo así debió hacer.

- Si Amo-chan – atendió a las indicaciones de Arthur para terminar el baño y se puso de pie en la tina. Se quedo mirando a su joven amo con las manos descansando en su pancita – Amo-chan ¿Donde están las toallas? – le pregunto con intenciones de tomar una para secarse y ayudar a su amo para que también estuviera seco.

Cuando Miku se puso de pie Arthur trato de desviar la mirada del cuerpo de Miku pero aun asi dio aun mirada completa al cuerpo del neko hacerlo si poder evitar culparse a si mismo por la idea que pasaban por su cabeza y por la reaccion que acaba de tener su cuerpo.

- estan por alla- le dijo mientras señalaba el lugar donde estaban colgadas varias toallas limpias

Arthur no sabia que hacer para esconder aquel “problema” que tenia entre las piernas y aun mas como iba a hacer para que el neko no se percatara de aquello cuando saliera de la tina, unica opcion era conseguir una toalla tapar su problema sin que Miku rapidamente pero aquello no parecia algo facil.