Al ver por donde el menor se lo llevaba se sorprendió, pero al entrar a una habitación, que solo era iluminada por unas velas rojas, y se contrastaban con las paredes…pero le llamo bastante la atención la cama donde Heimdall, estaba sentado mostrando parte de su cuerpo, estaba cubierta de una piel suave, y el respaldo tenia una bonita figura….-te felicito Heimdall, es una habitación excepcional- despojándose de su chaqueta, y abriéndose un poco la camisa, se
Acerco al menor como un lobo despiadado lo empujo, para que se estirara en la cama, se puso encima y le dio un beso sensual y corto…por que el cuello de Heimdall se veía apetitoso se lanzo hacia el, le deslizo la lengua de abajo hacia arriba lentamente… después con sus labios le beso, y no se pudo contener de morderlo…una mordida suave pero lujuriosa.