Sexo y unas copas [Arthur] (lemmon)

En la recepción del hotel solo basto que entrara para ser bienvenido con toda la amabilidad del dependiente; lo saludo cordialmente y enseguida le entrego la tarjeta que habría su suit.

- Toma asiento y ponte cómodo.

Le indico al chico apenas abrió la puerta y se deshizo de su abrigo dejándolo caer en un diván negro que estaba por ahí cerca, dejando al descubierto 2 halas blancas en su espalda. Enseguida tomo el teléfono y llamo al servicio al cuarto.

- Traigan una botella de champan a nombre de Chikara.

Después de colgar el teléfono se dirigió a Arthur.

- Me gustaría darte un buen trato. Para que te sientas cómodo y podamos… entrar en calor.

Sonrió maliciosamente y comenzó a acercarse furtivamente hasta llegar a Arthur.

- Perdona si te hago esperar, si lo prefieres podemos comenzar ya.

El chico estaba acorralado contra la pared, pero los golpes en la puerta detuvieron a Tenji.

- Son rápidos, aunque es la ventaja de ser cliente Premium.

Dijo separándose del muchacho para poder recibir la champaña.

En todo el camino Arthur no dejo tratar de pensar en un "plan de huida" para aquella situacion pero antes de que pudiese ejecutar alguno se encontraba ya en la suit del chico.

Tomo asiento mientras miraba de reojo la ventana preguntandose si seria demasiado alto como para saltar por ella pero volteando la ver las alas de chico alas que le hacian asemejarse a un angel pero para Arthur ese chico era un demonio un demonio que de alguna forma lo habia atrapado e impulsado a hacer cosas extrañas, un demonio del que buscaba liberarse.

Trato de moverse hacia la ventana pero antes de hacer movimiento alguno se sintio acorralado de nuevo sin poder moverse presa de aquel hechizo que parecia tener aquel chico en el penso que ya estaba perdido cuando escucho los golpes empezando de nuevo una furtiva caminata hasta la ventana pero al mirar por ella sufrio una gran decepcion, estaban en lo mas alto del hotel no habia forma de escapar.

Lo miraba de reojo sirviendo el champan en las copas, analizando sus movimientos en tanto la espuma burbujeaba tratando de escapar, exactamente igual que Arthur, quien parecía un avecilla atrapada y asustada, muy pronto le demostraría a ese pequeño pajarito inquiero que no había nada que temer.

Termino de servir las copas y se sento en un sillón amplio y como que adornaba la sala de la suit.

- Puedes venir para tomarte una copa.

Le aseguro como diciendo un callado “no hay peligro”.

Se volteo al escuchar las palabras de aquel chico, acercándose como guiado por la voz que de nuevo lo envolvía, no era exactamente miedo lo que sentía o quizás si pero era miedo a no poder controlar la situación de alguna forma aquel chico de alguna forma lo descontrolaba y eso nunca le había ocurrido.

Se sentó en el sillón sentándose algo lejos del chico y acepto la copa que le ofrecía mirando levemente a los ojos de aquel chico de aquella mirada tan penetrante y finalmente decidió dar un ligero sorbo de aquella copa.

- esta bueno- dijo por el simple hecho de hacer algo de conversasion y romper aquel incomodo silencio.

- Sí, pero ten cuidado, no lo tomes muy rápido o se te subirá a la cabeza.

En verdad Arthur era enternecedoramente sensual, tan hermoso e ingenuo. Sin saberlo, con sus inseguridades y timidez estaba seduciendo a Tenji. Quien sabe que cosas habrán pasado por su mente que repentinamente sonrió con malicia y dejando la copa de champaña sobre la mesita de noche se acercó un poco a su invitado. Pasó la yema de sus dedos por la quijada de Arthur y se atrevió a abrir algunos botones de su camisa.

- Eres muy bello Arthur.

Dijo acercando su rostro al de muchacho, de pronto poniéndose a gatas sobre el sillón y quitándole la copa de las manos para ponerla en la mesilla junto a la suya. Con los movimientos de su cuerpo lo obligo a recargarse contra el sillón, apoyando la cabeza en el reposabrazos. Puso una de sus piernas entre las de Arthur, apoyando sus manos a los lados de la cabeza del muchacho mirándolo con deseo. Comenzó a besarlo sin el mas mínimo ápice de compasión, simplemente se devoraba sus labios e introducía su lengua jugando con la de Arthur.

Cuando sintió la cercanía del chico sintió el instinto de huir pero repentinamente se vio atrapado entre el cuerpo del joven, se recostó un poco como en un impulso de huir de esa cercanía pero este intento fue inútil ya que de esta forma parecía aun mas atrapado y esto se dio cuenta la pierna de Tenji se puso entre las suyas limitando su posibilidad de movimiento.

Lo miro con una mirada que de cierta forma parecía aquella que pone una oveja que esta a punto de ser comida por un lobo luego sintió como sus labios eran devorados por el chico poniendo algo de resistencia en un principio pero luego cediendo ante la fogosidad del beso y respondiendo a los movimientos de Tenji.

Se veía tan provocativo con esa actitud de corderito, servido en bandeja de plata al lobo hambriento. Lentamente caía en el juego, dejándose llevar y disfrutando de el. Comenzó entonces a desabotonas la camisa de Arthur, lentamente, rozando sus nudillos contra la suave piel blanca de su pecho.

Aparto la camisa para poder descubrir por completo el pecho del muchacho y admirar sus pezones rosados. No se retuvo y empezó a frotarlos con suavidad, pero el gesto del rostro de Arthur lo impulsaron a retorcerlos para ver que clase de gestos haría ahora. Sonrió sádicamente acercando sus labios al cuello del chico y pasando su lengua por la extensión de la yugular, chupando su piel con ferocidad, marcándolo de rojo.

Llego entonces a los rosados y endurecidos pezones y comenzó a lamerlos, dejando pequeñas caricias húmedas con su lengua en todo su contorno.

Trataba de hacer algun gesto de negativa a aquellos movimientos pero en sus primeros intentos de articular palabra obtuvo unos suaves gemidos los cuales hicieron que tuviera que morderse los labios en un esfuerzo de no dejarlos salir.

Se percato de us pecho desnudo y luego su mirada se dirigio hacia la puerta como buscando alguna forma de escapar de aquello de cual sabia que no podia escapar. Su mirada bajo al sentir como el chico rozaba sus pezones, separando sus labios al sentir el ligero la presion en ello.

Unos quejidos salieron de sus labios entreabiertos haciendo que tratara una vez mas de cerrarlos al sentir como su cuerpo era marcado por el chico, trato de cerrar de nuevo sus labios pero esta vez aquel esfuerzo fue inutil porque casi sintio que la respiracion le faltaba al hacerlo parecia como si su cuerpo hubiese decidido premiar de alguna madera por sus acciones al rubio ya que los gemidos salian de sus labios sus control al sentir como sus pezones terminaban a merced de aquel demonio con apariencia de angel.

Los gemidos de Arthur eran ahogados entre los besos que derramaba Tenji sobre su boca.

Poniendo sus manos en el trasero de Arthur, levanto sus caderas hasta hacer contacto entre la entrepierna del chico y su pierna derecha, así comenzó a frotarse contra el lentamente, de vez en cuando acelerando un poco el movimiento.

- Tu cuerpo está muy caliente Arthur.

Dijo pasando un dedo por su pecho y estomago. El corazón acelerado del rubio se agolpo contra su pecho, ansioso por lo que perversamente se le había ocurrido hacer. Había dejado la champaña en la mesita de noche, junto con la jarra de hielos que habían traído para mantenerla fría. Extendió su mano para poder alcanzar la jarra y tomar uno de los hielos. Sus dedos se humedecieron con el agua fría del hielo que se derretía, y una gota cayó sobre el pecho tibio de Arthur.

Con el hielo Tenji comenzó a hacer círculos alrededor de los pezones de Arthur, después fue deslizándolo por su pecho, su abdomen y los labios del muchacho.

Sentia como el chico frotaba su cuerpo contra el suyo soltando leves quejido y a la vez aumentando la excitacion de su cuerpo, gemiendo incontrolablemente de una forma que se le oia entre necesitado y suplicante.

Ante las palabras del chico, solo pudo hacer una extraña mueca ¿acaso no le bastaba tenerlo asi? ¿ por que tenia que decir en voz alta cada reaccion de su cuerpo? tenia ganas de reclamar pero ante que lo hiciera sintio algo frio sobre su pecho que le hijo ante el constraste de temperaturas de su cuerpo el bloque de hielo. Sus ojos siguieron el bloque de hielo que se paseaba lentamente por su cuerpo dandole una mezcla de frio y calor que lo excitaba, lo excitaba mucho.

Dio un beso en la piel desnuda del chico sintiendo su calor corporal y oliendo el aroma de su piel.

- Sigues caliente.

Dijo sarcástico dando una caricia en el estomago del muchacho hasta llegar al pantalón. Sin titubeos desabrocho el botón, siempre atento a al rostro de Arthur y a sus expresiones tan hermosas. Bajo lentamente el cierre para encontrarse con lo que buscaba desde un principio. Nuevamente como en el bar del prostíbulo, su mano se poso sobre la tela de la ropa interior, haciendo presión en los genitales del joven, sintiendo como sus actos aumentaban la adrenalina en su propio cuerpo, le encantaba esta sensación, de todos los estímulos físicos que podía tener, ninguno le proporcionaba la misma sensación única que este.

- Dime que sientes Arthur.

Su voz era calmada, confiada, como si se tratara de nada. Entonces bajo el rostro hasta que su nariz choco contra el vientre del chico y comenzó a lamerlo en tanto seguía frotando su pene por sobre la ropa interior. En busca de provocarle mayor placer a Arthur comenzó a bajarle los calzoncillos con lentitud, para que pudiera sentir el rose de la tela en sus muslos.

Solo pudo hacer una ligera mueca de desagrado ante la expresion del mayor pero esta desaparecio casi al intante al sentir como el cierre de su pantalon era bajado a lo cual no opuso resistencia alguna ya que era mas que evidente que la parte baja de sus cuerpo pugnaba por atencion, se quejo ligeramente ante la presion de a pesar de ello no se separo al contrario casi como un acto reflejo acerco un poco mas su parte baja como mostrando con ello la ansiedad que ya empezaba a sentir.

Se mantuvo ladeo ligeramente el rostro al escuchar el confiado pedido el Tenji, decir lo que sentia en aquel momento era algo que iba completamente contra su orgullo. Sentia placer, calor, deseo...pero decirlo seria una de las ultimas cosas que haria, en lugar de eso solto movia levemente sus caderas en respuesta los movimientos del rubir y de sus labios salian mas que sonoros gemidos.

Sintio un ligero alivio al sentir aquella prenda que aprisionaba su parte baja era retirada pero casi inmediatamente el alivio desaparecio al darse cuenta que habia perdido el ultimo trozo de tela que lo protegia de ser comido por aquel lobo.

- No comas ansias Arthur.

Le sonrió de una forma tranquilizadora pero a la vez arrogante, leyendo el lenguaje corporal de Arthur el cual se veía sin duda necesitado de satisfacción. Recorrió su cuerpo un poco, apoyándose en los muslos de Arthur, deslizando su dedo pulgar para rosar sensualmente la ingle del muchacho. Tomo su pene con su puño, sin aplicar presión incensaría, acercando su boca, dejando caer el cálido aliento sobre la punta, recorrió la piel con cuidado y después comenzó a lamerla con movimientos lentos y envolventes. Frotaba el estomago del chico en tanto lamia el glande introduciendo la punta de su lengua en el orificio. Con la intención de tomar más calor, el rubio introdujo el miembro de Arthur más profundo en su boca, presionándolo entre la lengua y el paladar mientras era mojado por la saliva cálida de Tenji. Primero lentamente, pero después a un ritmo más acelerado, lo que provocaba el vaivén de su cabeza sobre la entrepierna del joven peli-morado. Acariciando su piel desnuda, sus muslos, su estomago.

Mostro una mueca de desagrado antes las palabras del rubio, casi se odiaba la arrogancia del chico, pero se odiaba por sentir placer ante el dominio que habia ejercido el mayor sobre el, ya que aunque tratara de negarlo su ereccion delataba claramente su exitacion.

Su cuerpo se estremecio al sentir como el dedo de Tenji se acercaba peligrosamente a aquella zona sencible y solto un ligero suspiro al sentir la lengua del mayor recorrer su ereccion el cual rapidamente se transformo en un gemido al sentir la calida lengua de Tenji recorria la suave piel de su miembro y cuando su boca tomo control total de su ereccion tuvo que hacer puño para contener la necesidad casi incontrolable de acariciar los cabellos de a aquel que le estaba causando aquellas placenteras sensaciones, quizas lo tenia dominado pero el nunca seria sumiso aun podria luchar un poco contra las reacciones de su cuerpo.

Arthur era un chico testarudo, pero esto solo incitaba más al rubio a seguir con su labor, desequilibrar los sentidos del joven Arthur era su perversa diversión. Continuo chupando el pene erecto del peli-morado, su boca estaba roja cuando se levanto limpiando con un dedo la comisura de sus labios. Lentamente mientras observaba directamente sus ojos se deshizo de la camisa mostrando su tórax desnudo y unas alas blancas que salían de su espalda. Paso su mano por debajo del trasero del muchacho, abriéndose paso hasta tocar aquella abertura sensible y caliente que pronto seria invadida por él. Acaricio un poco la abertura antes de sacar un pequeño frasquito cilíndrico con un lubricante viscoso en su interior que vertió en sus dedos y comenzó a calentarlo entre ellos. Le sonrió antes de inclinarse y tocarle de nuevo. Con la ayuda del lubricante no le fue difícil introducir un primer dedo en el recto del muchacho, el cual se comprimió al instante. Tenji solo sonrió maliciosamente y comenzó a mover su dedo dentro de Arthur, palpando su interior. Una vez estuvo listo introdujo un segundo dedo mientras seguía moviéndose dentro, en tanto con la otra mano masajeaba el pene de Arthur.

Gemia suavemente al ritmo de las chupadas del mayor sin poder evitarlo, era totalmente preso del placer que el rubio le proporcionaba. No era que fuese la primera vez que le hicieran una felacion pero si la primera vez que se sentia dominado por una, era la primera vez que era dominado por alguien y lo peor de todo era que gustaba aquello y su cuerpo lo rebelaba.

Sintio sus dedos acercandose a su trasero con una extraña sensacion de ansiedad y al mismo tiempo algo de temor ante las futuras acciones de mayor pero aun asi su cuerpo parecia totalmente dispuesto a dejarle libre pase al mayor dejando ingresar casi sin dolor el primer dedo que entro en el. solo pudo tomarse unos segundos para tratar de acostumbrarse ya que aquel dedo casi inmediatamente empezo a moverse recorriendo su interior sin reparo mientras que unos sonidos entre gemidos y quejidos salian de sus labios a pesar de que el trataba de acallarlos. El segundo dedo entro con mas dificultad debido a las estrechez del muchacho y al igual que el anterior fui practicamente atrapado por su entrada la cual parecio resistirse un poco ante aquellos movimientos pero finalmente termino por ceder permitiendole el movimiento en el interior del peli-morado que con sus gemidos parecia de alguna forma pedir mas de aquello de manera inconciente.

- Eres muy estrecho Arthur. – menciono tranquilamente introduciendo aun mas sus dedos dentro del muchacho, haciéndolos entrar y salir sin benevolencia. Finalmente los saco, aun estaban calientes y humedecidos. Acercó su lengua para lamer un poco la fina abertura del chico, por supuesto sin quitar la atención del miembro del menor, masajeándolo con su mano en tanto lamia el ano y los testículos de Arthur.

Aun no se había cansado de jugar con el muchacho, así que alargo su mano para alcanzar otro hielo que hizo rodar por los muslos interiores del peli-morado y en su abertura, haciendo presión en la misma tentativamente hasta introducir el frio trozo, que por ser tan resbaladizo se abrió paso con cierta facilidad.

Observo el rostro congestionado del menor no pudiendo evitar excitarse por su hermosa apariencia. Y con este impulso dieron un beso los labios del muchacho acallando sus gemidos, apegando su pecho desnudo al de Arthur; termino mordiendo con fiereza el labio inferior del chico.

Un ligero suspiro como entre queja y alivio salio de sus labios al sentir que los dedos del mayor salian de dentro de el pero casi instantaneamente su cuerpo se estremecio al sentir como la humeda lengua del rubio recorria su entrada.

Las acciones del muchacho habian logrado relajarlo y dejarlo completamente dispuesto a lo que vendria despues pero lo que vino despues fue completamente diferente a lo que el imagino. Aquel frio hielo en su interior causo movientos totalmente desorganizados en su cuerpo era como si no supiera reaccionar ante todas aquella sentaciones juntas. Como por instinto termino pasando sus brazos alrededor del cuerpo del chico y sus labios respondieron al beso con pasion casi descontrolada mientras sus caderas se movian acompasadamente ante la sensacion del hielo.

Disfruto la sensación cálida de los brazos de Arthur rodeándolo. De esta forma sentía como si la renuencia del menor a entregarse a él se desvaneciera, había sido él quien lo había abrazado, intentando apoyarse en el mayor. ¿Lo habría conseguido en verdad? Dominar por completo al muchacho. No importaba la verdadera respuesta pues para la mente arrogante del rubio había una contestación afirmativa. Limpio los labios de Arthur llenos de saliva con su pulgar, ya sentía como la tela le escocía la sensible e incitada piel de su entrepierna, bajo entonces sus propios pantalones ya antes desabrochados para liberar su miembro abultado. Roso incitantemente el glande enrojecido contra la abertura del peli-morado, como si anunciara lo que estaba a punto de hacer. Lentamente comenzó a ejercer presión de la misma manera que lo había hecho con el hielo anteriormente, solo que con un poco mas de dificultad. Un sonido gutural fue emitido por el rubio cuando sintió su miembro apresado por el interior de Arhtur. Afianzándose de las caderas del muchacho comenzó a embestirlo primero lentamente para que el menor se acostumbrara a sus movimientos.

Cerro los ojos al sentir que su miembro rozaba su entrada y al sentirlo entrar se aferro fuertemente a su espalda mientras entrecerraba los labios para no gritar ante el dolor que le producia la penetracion. No gritaria, por mas que doliera, no daria una muestra de debilidad tan evidente al rubio ya tenia suficiente con haber terminado en esa posicion, asi que no se quejaria por mas que aquello doliera mas de lo alguna vez hubiera imaginado.

Se aferro fuerte a su espalda como esperando que su cuerpo sediera un poco pero su cuerpo no dejaba de mostrar resistencia ante al intruso apresandolo complatamente en aquella estrecha cavidad. Los movimientos empezaron lentamente haciendo que Arthur tuviera que morder aun mas sus labios para no dejar salir queja alguna de ellos pero conforme los movimientos aumentaban el dolor poco a poco fue menguando y el placer que un comienzo era casi nulo se fue haciendo mas y mas presente conforme el ritmo de las embestidas aumentaban a tal punto que le fue imposible seguir mordiendo sus labios y dejo escapar de ellos gemidos que evidenciaban el placer de su cuerpo.

Pudo sentir la tención en el cuerpo del menor, sin duda era un muchacho muy obstinado y rebelde, eso le gustaba, pero tarde o temprano no podría negarse al placer que sentía, el tampoco tenía intenciones de echárselo en cara, era suficiente con que el mismo lo supiera. Se aferraba fieramente a su espalda, estimulando la piel sensible del rubio. El hundió su rostro en el cuello de Arthur, llenándolo con su aliento y humedeciéndolo con sus besos. Aumento el ritmo de los envites atrayendo una de las manos del muchacho para entrelazar sus dedos con los de él. Sentía el choque del miembro erecto del menor contra su abdomen cada vez que arremetía contra sus caderas. Sacaba por completo su miembro para introducirlo nuevamente lo más profundo que se le permitía. El cuerpo de Arthur se retorcía bajo los poderosos envites que el rubio le proporcionaba y la fricción entre sus cuerpos le causaba un deleite poco descriptible.

Su cuerpo le aferraba al del menor mientras sus jadeos se volvían cada vez mas descontrolados, el mayor penetraba su cuerpo pero de sus labios no salían mas quejas solo gemidos por el placer que sentía. Su cuerpo llegaba sentía que llegara al cielo con cada embestida y su cuerpo cada vez le dejaba llegar aun mas profundo en aquel lugar nunca antes explorado era casi como si su cuerpo guiara al miembro del mayor a aquel mundo en que le brindaría mayor placer, hasta que por fin llego a aquel punto de placer que hizo que el cuerpo de Arthur vibrara con el simple acercamiento y sus piernas se enredaran sobre el cuerpo del mayor buscando que aquel miembro tocara de nuevo ese punto ese punto que le había traído tanto placer.

Tenji sintió el cuerpo de Arthur estremecer, llenándolo de satisfacción, pero él no había terminado aun, quería escuchar a Arthur llegar al éxtasis, convertir sus gemidos en exclamaciones de placer. Intentando prolongar y multiplicar más aquel éxtasis en el muchacho, aumento el ritmo de sus embestidas nuevamente, frotando con su mano el miembro del peli-morado, con movimientos acelerados acordes a sus propios envites, frotando el glande contra su palma, consintiendo aquella zona erógena tan cálida y sensible.

Se sujetaba fuertemente al cuerpo del mayor mientras sus gemidos se tornaban cada vez más frenéticos, aquel placer lo volvía loco. No pensaba solo sentía, sentía como su cuerpo se enterraba fuertemente en el suyo brindándole placer de un tipo jamás experimentado.

Sintió la mano de mayor posarse sobre su miembro y quiso retirarla casi de inmediata de allí, aquello era demasiado placer para su cuerpo si el movía aquella mano no soportaría mucho lo sabia, trato inútilmente de retirarla pero ya era muy tarde, aquella mano empezó con aquel rápido vaivén dejándolo de nuevo a su merced, totalmente presa del placer que le hacia sentir.

Era casi su esclavo en ese momento pero solo un poco mas y el seria libre, un poco mas y terminaría de quitarle lo que aun le quedaba de virginidad, el seria una especie de medalla para ese demonio al cuyo cuerpo se aferraba, el único que había podido dominar su ser.

Un poco mas una embestidas y vería el cielo, casi lo sentía pero parecía resistirse tercamente a terminar como en un intento de no satisfacer al mayor pero por después de un fuerte embestida que rozo su próstata el orgasmo se hizo presente en su ser bañando la mano del mano con su esencia.

Se resistía con todas sus fuerzas, podía sentirlo luchar en contra de su deseo, era tan testarudo que Tenji no podía más que admirarlo, admirar su belleza, su determinación, aquel cuerpo hermoso que se resistía a ser poseído por completo. Le fascinaba todo lo que le fuera difícil de conseguir. Siempre se le había ofrecido hasta lo impensable en bandeja de plata, por ello disfrutaba luchar para obtener lo que fuera que le interesara.

Pese a su renuencia, el cuerpo de Arthur reaccionaba con el suyo, la intensidad los envolvía llevándolos al frenesí. Continuaba con los movimientos envolventes de su mano en el pene del menor, rápidos y constantes, al igual que sus embestidas que se volvieron más violentas para alcanzar ese punto en el cuerpo del peli-morado que se lo entregaría enteramente.

Finalmente lo consiguió y el fluido caliente mancho su mano. Hicieron falta un par de embestidas mas y las reacciones arrojadas de Arthur para que el rubio alcanzara el clímax, acompañando al muchacho en su frenesí, derramo su esencia masculina dentro de el dejando escapar un gruñido gutural, invadido de placer, lujuria, desenfreno y satisfacción. Apoyó su peso ligeramente sobre Arthur, cuidando el no dejarse caer por completo. Su respiración profunda hacia subir y bajar su pecho. Los cuerpos de ambos estaban humedecidos por el sudor y los fluidos corporales. Dio un beso en la clavícula del menor y con delicadeza lo alzó para ocupar su lugar y que el quedara recostado sobre su cuerpo. El sillón era amplio pero aun así no cabrían uno al lado de otro. Además no le molestaba, con la yema de sus dedos rosaba la piel de Arthur mientras recuperaba el aliento.