Hogar, "dulce" hogar...~·Privado//Lemon·~

No, no le diré….-Susurro, caminando al paso que le marcaba, dejando un camino de agua debido a que no se habías secado el cabello después de que Eoria le hubiese enjuagado.- Es mas, hasta así le motivo a aprender idiomas…-comento, muy serio, para después sonreír, mas aliviado de saber que no le entendería.

Si…lo HI…-suspiro, sin poder continuar debido al beso, cerro sus ojos, mirando a otro lado, sin decir mas, simplemente pensando que ese tono no le quedaba…no después de todo lo que había hecho.- Lo noto…no me gusta su alma…

Murmullo, serio, inflando su mejilla a modo de berrinche.

Suspiro tranquilo al verle separarse, para quedarse un momento mirándole, perdido ante la imagen del agua recorriendo su cuerpo, para, después, y con todo el calor que había agarrado, ir resbalándose al suelo recargado en la pared, haciéndose un ovillo, soltando un largo bostezo, sin preguntarse si quiera si se tenia que vestir…

Solamente se le quedo mirando, para después, pasar por alto, y, cerrar sus ojos, pegando su mejilla en el suelo, recuperando, poco a poco, la temperatura que le daba el frío del suelo…mientras, sonreía, casi angelical, ante eso. Suspiro suavemente, arrastrandose poco a poco, gateando, inconciente, hasta llegar de nuevo bajo la cama, al parecer…descubriendo que le gustaba mas estar ahí que arriba.

Griego, creo que el segundo era chino…o si no…no lo recuerdo…-Murmuro, mirando el polvo bajo la cama, sacudiendo un poco para recostarse mas a gusto, soltando un suave estornudo por la cortina- No suelo recordar que idioma es, solo…hablo lo que se, mi mente funciona raro…-Susurro, murmurando un “maldito Hanori”…para después volver a recostarse mas tranquilo.

Sintió el revolvedero de cosas arriba- Hey, no me deja dormir!...-murmuro, en tono infantil enojado, moviéndose un poco mas incomodo, después de todo el rechinido de alambres y demás que habían salido, rechinido que la noche anterior…no había notado (XD).

Suspiro, cerrando sus ojos un momento, hasta sentir una sombra, abriendo los ojos, los cuales, a pesar de las penumbras bajo la cama, eran perfectamente notorios, gracias por ese gran color rojo.-No puedo?...Me veo mejor sin ropa que con ella, si no, anoche, no me la hubiera quitado...- parpadeo, ladeando su cabeza, para salir poco a poco, suspirando frustrado de que no le hubiesen dejado en su…”cueva” improvisada, y es que, años en Hanori, al menos en su “casa”. Le habían hecho que apreciara mas la forma en la que la oscuridad llenaba un cuarto, de alguna manera…parecía más reptil que gato.

Salio de la cama, mirando sobre la cama, mirando a Eoria…-¿Qué me pongo…? – murmuro, mas por “molestar ” a Eoria, que por que no lo supiera.

Por un momento le ignoro. –Entonces…si me hace enojar puedo insultarle en idiomas?...- parpadeo, mirándole muy serio, para después sonreír…parpadeando ante su comentario, sin mostrar alguna señal de estar sonrojado o a penado por lo que estaba diciendo.

Mas, al escuchar ese timbre de voz, simplemente sonrío…-Bueno, dudo que alguien venga aquí, y…creo que no hay mucha gente que me quiera ver así…- Murmuro, besando su mejilla, para dejarle ir secando su cabello, haciendo que tomara tonos blancos.

Sin ponerle atención sobre la ropa…¿Qué importaba la ropa?!...la ropa simplemente se ensuciaba, y, después, tenias que cambiarte, tenias que lavarla…y gastabas, una perdida total de dinero y tiempo, era, por mucho, mejor estar sin ella…es mas, debía quemarla…si!...quemar a toda la ropa…Se quedo mirando, con una sonrisa siniestra el ropero de Eoria, riendo por lo bajo.

Hasta que escucho la vos de Eoria, sobresaltándose al instante debido a eso. –Ah…pues…yo sigo queriendo mi traje de pingüino…-Murmuro, para sonreír suavemente, suspirando sin ver muy confiado la ropa, ni muy a gusto con la idea de volver a tenerla enzima…simplemente se sentó en la cama, y en silencio, se empezó a vestir…de nuevo, y, para no perder la costumbre, haciéndose poco a poco mas a la orilla,…cayendo al suelo cuando paso por los pantalones…-Aow…la ropa…es mala…- comento, robándose la cabeza…parándose con dificultad y poniéndose frente Eoria…

-Mire, vestido, y como vaca...- murmuro, ante el moreton que le habia quedado en la nuca.

Suspiro, frustrado, sin siquiera intentar esconde los celos que habían nacido en el después de que mencionara al “Niño del pájaro”…es que…¿No podía pasar ni un día sin que hablara de el?...Eso si, empezaba a molestarle y, por ende, las ganas acecinas ante el pobre inocente empezaban a salir de el.

-Quizá le mate y le encierre en el ropero…- murmuro, demasiado bajo, seguro de que Eoria no le hubiera escuchado, aunque….quien sabe. Y es que…no podía ocultarlo, y que importaba si el mayor lo veía mal…¡Era celoso…! Más que celoso, posesivo. Y, Eoria, era SU amo, era en completo suyo. De nadie mas…-No lo quiero…- Siseo, para mirar a otro lado, sin siquiera dar un poco de señas de que iba a ayudarle.

Simplemente se dejo llevar, notablemente fastidiado por culpa de ese “Niño”, el cual quería matarlo y ahorcarlo….y que se fuera muy lejos.

Suspiro, al darse cuenta que le estaba vistiendo como si fuera un niño, deprimiéndose un poco por la comparación que, tal vez no lo fuera, había pensado entre…”niños”.-No…- Contesto rápidamente, olvidando todo lo demás, cubriendo, con ambas manos, su nuca.-No…- Murmuro, de nuevo, intentando que no le tocara, aunque era cierto que el moretón ocupaba gran parte, casi toda…, su nuca…no soportaba el calor, así que, simplemente, y para evitarlo…se salio de la habitación corriendo….

Bajando las escaleras a toda velocidad, y…escondiéndose bajo de una de las sillas, como si le hubieran dicho algo demasiado malo…-No quiero hielo…- Murmuro, aunque sabiendo bien que era mas por lo “otro”, que por la idea del hielo.

Si, lo sabia, era infantil y tonto su ataque de celos, y hasta irracional. Pero, si Eros no fuera tan visera..No seria Eros, y ahora, ahí estaba…bajo una silla, que, por su altura, era mas que obvio que no le cubriría, escondiendo su miedo a que le dejara por otro…. Que no era miedo, el mismo si eso quería si…mataría al chico, lo herviría vivo de ser necesario.

Se le quedo mirando, para arquear una ceja. En verdad creía que solo era por el…hielo?, suspiro, provocándole mas celos cuando miro que no le veía, saliendo un poco para acariciar el pelo de Tanis… mirando de reojo, a Eoria.-Idiota…- Murmuro, mas para el que para Eoria, mirándole, enfuruñado…-No es el maldito hielo… - Salio completamente, sentándose a su lado, abrazando sus rodillas y escondiendo su rostro entre ellas.

-No…quii…ero…que…le…toq…ue..n…- Murmuro, entrecortado. Ni siquiera el sabia por que tanto celos por una tonteria, por que lo era. Por dios, quien se preocupaba…por un simple…niño.-Ni que mencione a alguien mas…- hablo mas directo mirándole a los ojos- Yo no hablo de nadie!...bueno, tampoco es como que conosca a tanta gente…de hecho…solo a usted…-se quedo un momento pensativo.- Eso no importa, no es el caso, no me gusta que este mencionando al “Niño pájaro” todos los días…-sentencio, volviendo a meter su rostro entre sus rodillas, en un berrinche, si, de nuevo, infantil.

Y todavía de que se lo dije en lituano…- Susurro, con un timbre de nuevo algo infantil, pero, sin llegar a hacer el sumiso que había usado antes.

Si…personas sin importancia…-murmuro, mirando a otro lado. Mascando las palabras al sentir la nariz en ese punto, casi olvidando todo, mas, el simple hecho de que “ahí el era el ofendido”, llámese estúpido orgullo, le detenía para olvidar los celos.

Si hasta del repartidor había tenido que no tuviera por un niño pájaro que venia todos los días. Aunque…quizá se lo comería…después de todo era un gato/reptil…quien sabe que mas. –No es enfado…son celos…- Siseo, no le importaba, nunca le había importado lo que se pensara de el, y, ahora era mucho menos, simplemente lo quería decir, que el se enterara…que no era enfado!, por dios, ahí si, era tonto enfadarse por eso…solo que el que le nombrara significaba que estaba en su mente…

Y no quería que nadie mas hubiera en la mente de Eoria… Si, lo sabia, los celos solo demostraban su inseguridad, pero…eso era algo que era mas claro que el lo tenia…así que, que daba? …para que ocultarlo.

Y?, yo se lo dije…es su culpa por no saber lo que yo digo…-murmuro, inflando su mejilla, para ver a otro lado.- Nhebukm, Wuo ai nee, Mahal ka ta, Asavakit, Szeretlek…. Es tevi milu!!... Ya tyebya lyublyu!!!-Casi, o mejor dicho lo hizo, grito. Se le quedo mirando- Alguno de esos entiende?...-sonrio, entre sarcástico, y alifado, agradeciendo de que la empresa se hubiera metido con su cerebro haciéndole aprender mas idiomas.

En parte era por el enojo del niño, aun…mientras que se cruzaba de brazos…- T…-Suspiro, negando, para mirarle de reojo- Te ljubam…

…-Suspiro, bajando la mirada, sin siquiera notar que le había dicho que había entendido algo.- lo siento…-Murmuro, no era que le quisiera gritar, era que no podía hacer nada contra su naturaleza, el mismo lo sabia. Y nunca cambiaria, eso también lo sabía.

Salio al patio, suspirando, no se sentía mal, al menos no del todo. Simplemente bajo la mirada, subiéndose al primera árbol que encontró, solo, que ahora, de tal manera que no se veía, ya que había llegado a la copa, donde…las hojas lo ocultaban. Se recargo sobre el árbol, llevándose una mano a su cabeza.

-En que momento empecé…- Suspiro, empezaba a odiarse a el mismo, se quedo sentando en ese lugar, hasta que, su curiosidad, le hizo seguir un gusano de color verde que caminaba, o se arrastraba, a la cima del árbol, el cual era uno de los mas altos que había en la casa de Eoria.

Terminando, sin saber como, en una de las ramas mas altas…y, la cual, se veía demasiado frágil.”Genial, ahora me suicido sin quererlo…” Suspiro, mirando hacia abajo, ayudando, en gran parte, por su poco peso para no caer, pero eso no evitaba…el “vértigo”, o las ganas que decían “ya estas aquí, ahora tirate.” Se sentó en la rama, tan tranquilo como si estuviera en el suelo, mirando una especie de roedor, de pelaje café, con una cola afelpada…la cual no conocía. –Hola…- Susurro.-Sabes bajar?...- Parpadeo, mirando la rama, para calcular la manera de que…un salto, si, efectivamente, le mataría.

-Ah…la muerte la muerte…~- Canturreo desde arriba, moviéndose peligrosamente, para, después, como si se tratara de una barra de ejercicio, poner las manos en la rama, y darse la vuelta…de modo que quedara de cabeza, muchos metros arriba del suelo…-Viva!...- Grito, en un tono mas bajo, por si , le molestaba…claro.

¿Y que mas daba…? Si se caía, ahora, mismo, no creía que mucho, después de todo…como lo pensaba…ya estaba arriba.-Esto es divertido…- Comento, mirando al roedor, soltando una larga, e infantil, risa. Empezando a balancearse, ahora, de cabeza, ya…ni vértigo sentía.

Hola señor!!...-Grito, al escuchar a Eoria hablarle, aunque, no le había escuchado del todo…Al menos había escuchado el bajar…- Quiero, pero no se como…-Admitió, soltando sus manos, por ende, quedando solo sostenido con las piernas. – Mi amiguita me enseña como…-Señalo a la ardilla, la cual, al parecer era voladora, la cual…salto de un árbol a otro, y Eros, con la poca interacción que había tenido con el mundo, estaba apunto de hacerlo- cree que pueda!...-grito, de nuevo, para mirar la rama que estaba mas abajo, soltándose del agarre…

Cayendo, al menos unos cuantos centímetros, provocando una sensación de adrenalina que le había fascinado. Aunque, como su idea no era matarse, se sostuvo rápidamente de una de las ramas que estaba mas abajo, después de todo era ágil- Yu-pi!!....-Suspiro, emocionado, con el pelo notablemente alborotado por la caída libre…- No lo quiere intentar?, es divertido…-Comento, mas que nada la sangre ya no sentía el miedo, puesto que la adrenalina lo había logrado colocar en una escala más arriba de su locura.

Pero, prefirió no hacerlo mas, simplemente, siguió bajando mas normalmente, para cuando estuvo a una altura mas chica, simplemente salto, irónicamente, perdiendo el equilibrio cuando cayo- jajaja…-empezó a reír por lo bajo, le parecía tonta y divertida la manera en la que se había caído.- Ya… Estoy…aba..jo jja…-murmuro, entre risas. -

Seguía riendo, tirando en la hierba, solo con unos cuantos rasguños en la mano derecha debido al agarre y…las astillas del árbol. Pero, por primera vez, en algo de tiempo, había encontrado algo que le divertía del todo, o al menos, que le hacia olvidar…La adrenalina, y…eso le encantaba. –Pero…fue divertido…- Murmuro, sin poder evitar reír.

Tan divertido como un niño pequeño que mete su gato en la lavadora. –Me lo prohibirá…?..- Murmuro, con voz melosa, tomando el te. Para dejarlo en el suelo, mirando al árbol. Bajando la mirada cuando miro que Eoria temblaba…¿Tendría frío?...Parpadeo, mirándole un momento, para abrazarle con fuerza, acurrucándole en su pecho…creyendo que, efectivamente, tenia frío.

Para, después soltarle, tirándose en el pasto, a lo que la ardilla se acerco a ellos…-Ve, a la ratita también le parece divertido…- Murmuro, señalando, lo que para el era una rata mas bonita. Y divertida…La cual se subió al rostro de Eros, subiendo de nuevo al árbol…mirando, en momentos, a donde estaba el peliazul-No me dejan!...- Señalo a Eoria, mirándole de reojo.-Es aburrido…- Murmuro, mirándole, aunque lo dijo en un tono mas bajo, como si le dijera un secreto a la ardilla. Para después, seguir riendo…quedando en ese momento “post” de la adrenalina.

-Parpadeo mirando a la supuesta ardilla, alzando una ceja.- Le conoce para saber que se llama ardilla?...-Curioso nombre, en su vida lo había oído, pero, le parecía chistoso, al menos, para un animalito tan curioso como la rata que se acaba de encontrar. Se le quedo mirando un momento, eso lo sabia, pero…le parecía tremendamente divertido, y eso le ganaba la ciencia…

Suspiro, cuando miro que el otro se metía, pensando por un momento en subirse, sin saber muy bien que era “desnucarse”, esa palabra aun no se la habían enseñado en Hanori. Nunca, la había escuchado, de alguna forma u otra era algo nueva para el, sintió un golpe algo fuerte en la cabeza, lo que fue era la ardilla que había aterrizado en ella…

Shhh…-le dijo, para entrar, en silencio, a la cocina, alcanzando a Eoria y abrazándole por la espalda- Perdón, es que…nunca había encontrado algo que me hiciera sentir eso…-murmuro, sin saber bien de que sensación hablaba..-¿Me perdona…?-Murmuro, meloso, dejando un corto beso en su oído, teniendo un “nido” de la ratita en su cabeza, ya que, al parecer estaba muy cómoda en ella.- No quería que se…molestara…

No le soltó, al contrario, le hizo que se acercara mas a el, ronroneando al estar tan pegado a su cuerpo, dejando cortos besos en sus cabellos.
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¿Peligroso…? Pero…se había sentido bien, demasiado bien, no creía que fuese tan peligroso como el decía, después de todo…el, con ella o no, tenia esa pulsión que le hacia buscar la muerte, y que mejor trágica. No era algo mas de lo que ya había demostrado, ese…camino que quería tener hasta que, inevitablemente, muriera.

Lo siento…-Murmuro de nuevo, solo que esta vez besando sus labios…¿Asustarle?...el nombre lo conocía, pero no lo sabia asimilar con algún sentimiento, tenia problemas con los sentimientos “humanos”, pero…, de alguna manera, se sentía mal por provocarle eso.-Parque?...- Parpadeo, asintiendo suavemente, no por que quisiera, le gustaba mas los árboles, ese sentido del peligro, si, pero libre.

Que es una rata…-Dijo, en un tono infantil inflando su mejilla- o al menos…un roedor?...-Parpadeo, sin saber bien lo que decía, o al menos lo que era la tal “Ardilla”. Más al sentir esa caricia solo pudo sonreír suavemente, ronroneando más ruidosamente.- Ah, si, lo se…no es que quiera vivir…es que el color azul le parece mejor que el verde…-Comento, no, realmente no. Al menos no a la ardilla, pero si a Eros, el color verde lo consideraba feo.

Solo…-Suspiro, mirando a la ardilla que ya le había despeinado por completo, a lo que la ardilla se paso por el brazo de Eros hasta Eoria, para dejar, en sus manos, una especie de nuez que tenía agarrada con la cola. Para después volverse a parar en la cabeza de Eros, pasándole la cola por la cara, para volverse a subir- Una…especie de disculpa…-Susurro, abrazándole, para besar de nuevo sus labios. – Perdón, no lo hice con la intención de…asustarle…-Eso si era verdad…No tenia idea de que las cosas provocaban algunas reacciones, de algún modo, debido a todo el encierro a tan corta edad, había tomado una especie de “problema”, con el cual no calculaba ningún peligro, de alguna manera, era como un…niño.- No…volveré…a tirarme de esa manera.

Suspiro, rascándose la cabeza, revolviendo mas los cabellos, dejando una especie de maraña azulada…Era complicado, demasiado….bastante, comprender a Eoria, el mismo le había dicho que lo hiciera de nuevo. Pero…ahora decía que le había asustado… ¿Entonces?...Suspiro, confuso.-Si, Roedores o Rodentia…- suspiro, la clase, nombre científico, tamaño…ubicación, alimentación…todo lo que quería, se lo habían enseñado en Hanori, si, pero solo lo científico.

Entiendo…- murmuro, mirando al árbol.-Nunca le había visto….en Hanori, los científicos, solo tenían ratas…y bueno, después me encerraron, no conozco mucho…- Susurro, intentando explicar el por que le había gustado la…”ratita” o, al menos, por que le llamaba ratita.

Sonrío suavemente al sentir ese abrazo, haciendo lo mismo, pegando su mentón en la cabeza de Eoria, moviendo su mentón…acariciando, con el, sus cabellos, ronroneando. Beso suavemente su mejilla, mirándole a los ojos.-Pero…me dejara subir?...no es que me quiera volver a aventar…es que…-suspiro, sin saber que mas decir. Para verle a los ojos.

Más bajo…si quiere…- Murmuro, bajando un poco la mirada. Y es que…acababa de descubrir la fascinación que tenia por las alturas, y…por la vida en el árbol del mayor.-Oh, si, también tiene…una especie de…fideos, mas gordos y verdes…- Murmuro, si, como era notable, tampoco había visto un gusano…y, de este si, nunca le habían hablado de ellos.

Suspiro, sin decir mas, simplemente, sentándose en el suelo…jalando a Eoria junto con el, de modo que quedara sentado en sus piernas, ronroneando de nuevo, escondiendo su cabeza en su cuello.