Zados: La Isla del Pecado
¿Quieres reaccionar a este mensaje? Regístrate en el foro con unos pocos clics o inicia sesión para continuar.
Zados: La Isla del Pecado

Foro de temática Yaoi
 
ÍndicePortalÚltimas imágenesBuscarRegistrarseConectarse

 

 Bück dich befehl ich dir [Inclínate, te lo ordeno][Privado, con sado, no entrar]

Ir abajo 
AutorMensaje
Huésped
Invitado




Bück dich befehl ich dir [Inclínate, te lo ordeno][Privado, con sado, no entrar] Empty
MensajeTema: Bück dich befehl ich dir [Inclínate, te lo ordeno][Privado, con sado, no entrar]   Bück dich befehl ich dir [Inclínate, te lo ordeno][Privado, con sado, no entrar] I_icon_minitimeDom Sep 14, 2008 10:41 pm

Allí habían llegado las dos figuras después de que caminaran largo rato bajo el sol. El alto hombre caminaba taciturno con la vista al frente mientras el otro se deshacía en golpes para el mayor intentando regresar al pasado, a lo que pudo ser, tratando de retomar su "sueño" con otro en peores condiciones que él.

- Calma... ya llegamos... -

Tal vez le cambiaría el nombre, sólo tal vez, si lograba agradarle, si lograba sobrevivir a la primera noche de entrenamiento.

Todo el mundo compraba un lacayo para probarlo en la cama, pero él... Raub Folterung, de origen germánico poco le importaba aquello, se resarcía en las torturas, lo que lo llevaba a placeres extremos.

No, la cópula quedaba para aquellos con corazón, para él solo la sangre y agresión inundaban su imaginación, sus sueños sus momentos de jolgorio y placer.

Qué más bello que un cuerpo con el rocío propio del mismo ser... el sudor, de sólo experimentar el dolor de ser torturado hasta que aprendiera lo que él deseaba dar a conocer.

Había tomado al que supuso resistiría, por lo que no pensaba ser flexible. Al momento de llegar a su guarida, abrió la puerta de una zancada. Cerró luego con llave y giró.

La vivienda era amplia y oscura, dos habitaciones y una sala, más una bodega que parecía abandonada, más... sólo habían implementos que tal vez el muchacho había visto ser utilizados en otras empresas, como... una carnicería, o tal vez... en la milicia.

En una esquina solitaria y apartada de emplementos, depositó gentilmente a Jasper y un grueso grillete colocó en su cuello, otros en cada muñeca y tambén en los tobillos, para luego retirar la ropa de éste y así dejar toda su piel expuesta ante sus ojos.

- Duerme... que pronto vendré por ti -

El lugar era apartado por lo que si gritaba o lloraba, nadie haría caso, dio media vuelta y cerró dejándolo en completa oscuridad.
Volver arriba Ir abajo
Huésped
Invitado




Bück dich befehl ich dir [Inclínate, te lo ordeno][Privado, con sado, no entrar] Empty
MensajeTema: Re: Bück dich befehl ich dir [Inclínate, te lo ordeno][Privado, con sado, no entrar]   Bück dich befehl ich dir [Inclínate, te lo ordeno][Privado, con sado, no entrar] I_icon_minitimeLun Sep 15, 2008 5:02 am

La decisión del pelilargo parecía sin duda inescrutable. Pese a que se había retorcido, le había llegado a golpear y le había soltado toda clase de improperios, se encontró arrastrado con parsimonia del otro.

No había logrado ver mucho de aquel habitáculo, pues la luz tenue y su continuo forcejeo se lo impidió pero sabía en que barrio se encontraba, lo que le hizo estar alerta. En todo momento.

Movió hacia abajo los brazos en un intento por soltarse de aquellos grilletes que permanecían maniatados a sus muñecas, enroscados en su piel. Esas cadenas le hacían tener los brazos ligeramente alzados en una incómoda postura, mientras que sus piernas podían yacer prácticamente del modo que gustase. La desnudez le hizo temblar, aunque no era lo que ahora le importaba.

Se mofó en silencio del otro. No pensaba dormir. Esperaría hasta que el mayor regresarle para soltarle toda clase de golpes y, con suerte, podría salir de allí.

Ladeó la cabeza e intentó llegar a alguna de esas cuerdas de hierro, pero el grillete que tenía en su cuello le hizo entrecerrar los ojos. Si tiraba mucho más terminaría ahogado por su propia temeridad.

Lo dejó por inútil y no fue hasta en ése mismo instante que se fijó en la sala. La luz no filtraba, apenas había un rayo de luz que entraba por el entrecerrado y castigado ventanal. Abrió los labios. Ni el mismo hubiese podido definir su expresión.

Aquello no era una habitación normal. Ya se había jactado de ello cuando se vio atado, pero pensó que era un simple fetiche. Un juego.

Comenzó a comprender, con pánico que no llegaría a admitir, que aquello, no iba a ser un juego. No uno agradable. Los utensilios tenían máculas oscuras, y todo tenía cierto aire malévolo, oscuro, tétrico.

Desesperado volvió la mirada a aquella ventana en el que, al paso de las horas que parecían no existir, comenzaba a oscurecer el día.

Entre todos los que habían podido llegar a fijarse en él... Fue el aquel que jamás hubiese deseado cruzarse.
Volver arriba Ir abajo
Huésped
Invitado




Bück dich befehl ich dir [Inclínate, te lo ordeno][Privado, con sado, no entrar] Empty
MensajeTema: Re: Bück dich befehl ich dir [Inclínate, te lo ordeno][Privado, con sado, no entrar]   Bück dich befehl ich dir [Inclínate, te lo ordeno][Privado, con sado, no entrar] I_icon_minitimeMar Sep 16, 2008 9:22 pm

¿Cuánto tiempo había transcurrido desde el momento en que llegó a su "hogar" con aquel mocoso que no había hecho más que moverse así como rata enredada?, no lo recordaba, ¿uno?, ¿dos?...

Tres días completos con sus noches habían pasado desde el momento de cruzar el umbral de aquella morada, no había ido a verle, en oscuras, sin aire ni comida le había dejado encadenado de pies, manos y cuello para que así apaciguara sus ansias de libertad.

Debía entender quién era el que comandaba en aquella relación.

Aquella mañana había llegado, después de hacer unos cuantos trabajos que le habían aportado cuantiosas divisas, por ello andaba de buen ánimo.

Pasos firmes avanzaban estruendosos hasta aquella habitación. La puerta gruñó al momento de abrirse lentamente, provocándole momentanea ceguera al ser al interior.

- ¿Sigues vivo? -

Su voz parecía rajar la habitación en dos.
Volver arriba Ir abajo
Huésped
Invitado




Bück dich befehl ich dir [Inclínate, te lo ordeno][Privado, con sado, no entrar] Empty
MensajeTema: Re: Bück dich befehl ich dir [Inclínate, te lo ordeno][Privado, con sado, no entrar]   Bück dich befehl ich dir [Inclínate, te lo ordeno][Privado, con sado, no entrar] I_icon_minitimeMar Sep 16, 2008 9:45 pm

No sabía cuando tiempo llevaba allí. Cuanto hacía que no comía, dudaba siquiera el si reconocería el sabor de la comida en el hipotético caso que llegara de nuevo a sus resecos labios.

Desistió de liberarse, pues pese a haberse retorcido durante horas y horas enteras, aquello grilletes no cedían ni hacían ademán de inclinarse a sus gestos.

Estaba débil, la manca de comida había hecho mella en él, pero el sueño que se hecho por un par de horas en esos días pareció darle la fuerzas necesarias para seguir debatiéndose entre él y la futura muerte.
No tenía posibilidad de ganar, pero tampoco de perder. Tenía que permanecer firme, impasible. Pronto encontraría el modo de salir de allí...

Tarde. Aquellos pasos le alertaron los sentidos. Eran fuertes, cómo los recordaba. Sin duda alguna, se trataba de aquél quién pese a su voluntad se lo llevó del prostíbulo.

Por mera reacción entrecerró los ojos cuando la cegadora luz de fuera filtró en ése oscuro cuarto.

- ...S...suél…tame...- Cuando habló se sintió la garganta seca, tirante. Le dolía. Quería comer, ahora, ya. Salir de allí cuanto antes.
Volver arriba Ir abajo
Huésped
Invitado




Bück dich befehl ich dir [Inclínate, te lo ordeno][Privado, con sado, no entrar] Empty
MensajeTema: Re: Bück dich befehl ich dir [Inclínate, te lo ordeno][Privado, con sado, no entrar]   Bück dich befehl ich dir [Inclínate, te lo ordeno][Privado, con sado, no entrar] I_icon_minitimeMar Sep 16, 2008 10:04 pm

Aquel espectáculo parecía angelical, el muchacho de corta melena, con el cabello desordenado al igual que sus prendas. De las muñecas resbalaban hilos de sangre, lo cual sólo ahunó sus ansias de tenerlo cerca... probarlo... saborearlo.

Sus orbes claras centelleaban a pesar de estar contra la luz que cegaba a Jasper.

Los pasos se reanudaron una vez más hasta que llegó al cuerpo aletargado que pendía en singular posición desde los grilletes impuestos a la fuerza por él mismo.

Lo observó desde los pies inclinados hasta la mollera y alzó lentamente el brazo derecho para con el dorso de la mano azotar con brutalidad la mejilla más cercana y voltearla la cara.

- Aprende a respetar mocoso! -

Giró, como si se tratara de un militar, mientras el cabello lacio y largo azotaba el rostro ya magullado.

- De ahora en adelante me tratarás de tu señor... -

Decía tranquilamente a pesar que la voz se sintiera como proviniendo desde el fondo del suelo, como un gruñido, como si tratara de partirlo con la misma.

Volteó a mirarlo y cogió enérgicamente aquel mentón para obligarlo a que lo mirara a los ojos.

- ¿Entiendes o debo golpearte hasta que respondas adecuadamente? -

Ni una mueca de compasión por aquel que serviría de semental para los que vinieran en el futuro.
Volver arriba Ir abajo
Huésped
Invitado




Bück dich befehl ich dir [Inclínate, te lo ordeno][Privado, con sado, no entrar] Empty
MensajeTema: Re: Bück dich befehl ich dir [Inclínate, te lo ordeno][Privado, con sado, no entrar]   Bück dich befehl ich dir [Inclínate, te lo ordeno][Privado, con sado, no entrar] I_icon_minitimeMar Sep 16, 2008 10:14 pm

Aquella fue la primera vez desde su vida cómo esclavo se sentía cómo tal. Ése de mirada macabra no le inspiraba temor, aunque si respecto.

Gimió y su rostro se vio bruscamente ladeado por la intensidad de la bofetada. Hizo una mueca con la boca, tratando de aliviar el dolor que sintió en esa zona. Pronto la fragancia de ese cabello llegó a él, impacientándole. Rozándo sus fracciones.

No habló, aún y cuando éste le tomó por el mentón para mirarle a los ojos. La voz del mayor era sin duda provocadora de espanto. No hablaba; Gruñía. No ordenaba; Imponía.

Entrecerró los ojos sin que sus pupilas se vieran alteradas en su rumbo. Se centraba en esa peculiar y clara mirada y no fue hasta que soltó su última pregunta que no hizo ademán de escucharle.

Asintió una sola vez. Aunque el hecho de estar dándole la razón no implicaba obedecer sus normas. Pero ahora se sentía demasiado cansado para luchar y tan hambriento que temía el terminar mordiendo la mano de su "amo".
Volver arriba Ir abajo
Huésped
Invitado




Bück dich befehl ich dir [Inclínate, te lo ordeno][Privado, con sado, no entrar] Empty
MensajeTema: Re: Bück dich befehl ich dir [Inclínate, te lo ordeno][Privado, con sado, no entrar]   Bück dich befehl ich dir [Inclínate, te lo ordeno][Privado, con sado, no entrar] I_icon_minitimeMar Sep 16, 2008 10:47 pm

Sonrió impaciente, aquel que tenía en frente le producía algo de conmoción. Tan deliciosamente molesto que le provocaba destriparlo de inmediato. Sin embargo, no ganaría nada con hacerlo, nadie le había pagado para llevar a cabo una sangría como tal en sus aposentos, o lo que era igual, la sala de "juegos".

Y visto que sólo un mero movimiento de cabeza fue la respuesta para tal elegante interrogación, no pudo más que responder a la falta de respeto con otro bofetón, que supo a sangre una vez que las narices del chico derramaran abundante líquido carmín.

- Supongo que no te educaron adecuadamente... -

Movía sus dedos y luego masajeó la mano tronando los nudillos ansioso por continuar con la golpiza.

- Tendré que darte lecciones... -

Caminaba en forma de arco, rodeándolo. Nuevamente un puño vino certero hasta su vientre y le quitó todo el aire que llevaba en el interior.

- ¿Responderás? -

Otro golpe y el chico ya pendía de los grilletes sin poder sostenerse con los pies.

- ¿O me obligas a hacerte entender? -
Volver arriba Ir abajo
Huésped
Invitado




Bück dich befehl ich dir [Inclínate, te lo ordeno][Privado, con sado, no entrar] Empty
MensajeTema: Re: Bück dich befehl ich dir [Inclínate, te lo ordeno][Privado, con sado, no entrar]   Bück dich befehl ich dir [Inclínate, te lo ordeno][Privado, con sado, no entrar] I_icon_minitimeMar Sep 16, 2008 11:19 pm

El golpe propinado en la nariz le había dolido significativamente más que el que fue asestado contra su pómulo. Éste, si más no, le estaba haciendo sangrar y aquel líquido fue a parar sobre sus resecos labios, dándole nauseas.

Otro golpe; En su vientre. Se retorció bajo la sujeción de los grilletes que se enroscaban en su sangrantes muñecas y abrió los labios únicamente para toser y con ello, expulsar algo de sangre que cayó en forma de lluvia al suelo.

Un golpe más... Y sus pies no aguantaron, dejó que su peso fuera sujeto por aquellas cadenas que se anudaban a sus manos, cosa que agradeció el hierro que le envolvía, pues aquella zona, ante la presión de su propio peso, comenzó a sangrar con más ímpetu.

- Que... Que te trate de señor...? – Farfulló mientras se debatía entre el cansancio el hambre y el dolor. Rió quedamente. Ése tipo le había menospreciado... O sabía perfectamente con quien trataba.

Se pasó la lengua por su propia comisura y de ése modo, retiró la sangre aún fresca que de su nariz brotaba. No iba a inclinarse.
Volver arriba Ir abajo
Huésped
Invitado




Bück dich befehl ich dir [Inclínate, te lo ordeno][Privado, con sado, no entrar] Empty
MensajeTema: Re: Bück dich befehl ich dir [Inclínate, te lo ordeno][Privado, con sado, no entrar]   Bück dich befehl ich dir [Inclínate, te lo ordeno][Privado, con sado, no entrar] I_icon_minitimeMiér Sep 17, 2008 9:16 pm

Tenía brios... y le agradaba aquello, pero no por ello le trataría como los demás lo harían, con miedo. Pues no sentía el más mínimo miedo por él, sólo le causaba gracia ver como se negaba a reaccionar.

Por lo que no le quedó otra alternativa más que cogerlo del cabello y azotar un par de veces su cabeza en la muralla de concreto. Tal vez así comprendía que debía ser siervo de él, de ninguna manera insolente, aunque... si deseaba un perro de pelea, no le gustaría una lombris lánguida que se arrastrara por el suelo.

- Será mejor que respondas como me gusta... eso si es que quieres volver a comer... -

Entonces, giró y lo dejó ensangrentado, llevando un mechón de cabello entre sus dedos debido al jalón que le había dado.

Lo dejaría unos cuantos días en la oscuridad de aquella habitación, sin agua ni comida, de modo que aprendiera que debía respeto a su dueño.
Volver arriba Ir abajo
Huésped
Invitado




Bück dich befehl ich dir [Inclínate, te lo ordeno][Privado, con sado, no entrar] Empty
MensajeTema: Re: Bück dich befehl ich dir [Inclínate, te lo ordeno][Privado, con sado, no entrar]   Bück dich befehl ich dir [Inclínate, te lo ordeno][Privado, con sado, no entrar] I_icon_minitimeMiér Sep 17, 2008 9:34 pm

Golpes, golpes y más golpes. Si seguía así su cabeza se partiría en dos, estaba seguro de ello. Incluso, en cada golpe, un punzante dolor en los oídos crecía, alertando del deplorable estado en el que se encontraba.

Algo pareció quebrarse, seguramente habría sido su nariz. Ya no la sentía. Apenas podía notar cómo la sangre emanaba de cada poro de su rostro y se deslizaba en un lánguido camino hasta perderse en su cuello. Ahora ya tenía toda la cara ensangrentada y su reseca boca parecía agradecer el contacto de algún líquido, pues había estado encerrado allí ya tres días.

Comida. Si aquel había sido un reclamo para que obedeciera, había acertado. Entreabrió pesadamente los parpado, le dolía toda la cara e incluso, le era ahora complicado llegar a definir las sombras. Pasados un par de segundos, se fue clareando y pudo distinguir el gigante cuerpo que estaba frente a él, cuerpo que ahora le daba la espalda.

No importaba. Ahora todo volvía a la oscuridad. No lloró, no soltó ningún sonido lastimero... Pero algún tipo de sombra parecía arrastrarle a sus dulces garras.

Los grilletes superiores chirriaron cuando su cuerpo desfalleció. Seguramente, producto e la gran cantidad de sangre perdida sumada a tantos días sin comer.
Volver arriba Ir abajo
Huésped
Invitado




Bück dich befehl ich dir [Inclínate, te lo ordeno][Privado, con sado, no entrar] Empty
MensajeTema: Re: Bück dich befehl ich dir [Inclínate, te lo ordeno][Privado, con sado, no entrar]   Bück dich befehl ich dir [Inclínate, te lo ordeno][Privado, con sado, no entrar] I_icon_minitimeJue Sep 18, 2008 7:37 pm

Horas más tarde el delgado hombre ingresaba a aquella habitación que tanto agrado le aportaba, era oscura y el hedor a sangre putrefacta le parecía que acariciaba sus pálidas mejillas, aquello si que era algo acogedor, mucho más si como plato fuerte había un muchacho dispuesto a dar guerra contra él, sabiendo que tenía todo que perder.

Caminó lentamente, como un desfile fúnebre hasta posar su mano sobre la mollera dorada, mover los largos dedos en forma circular para coger un buen mechón de cabello y obligarlo a mirar hacia él, la sonrisa nuevamente aparecía en su cara. El chico estaba inconsciente.

- Débil... -

Masculló como burlezco de tan patético que se dejaba ver por otro. Entonces, quitó los pesados y mohosos grilletes que habían dejado huella en la piel del muchacho y lo arrastró de un brazo hasta otro cuarto, como si se tratara de un estropajo del que se desharía pronto.

Lo alzó en el aire para dejarlo caer sobre un mesón y comenzó a registrarlo con calma, para quitarle las prendas que cubrían el cuerpo que ahora le pertenecía.

Una vez que sus dedos deambularon por todas... TODAS las cavidades de su cuerpo, lo metió a una pequeña jaula donde no podía más que estar acuclillado pues el espacio era mínimo. Allí, cerca de la jaula dejó trozos de carne cruda y un vaso de agua turbia.

Si quería sobrevivir, tendría que hacer por él un entrenamiento exhaustivo todo el tiempo, no le permitiría dormir, no le dejaría comer sin que se ganara el sustento, pues deseaba usarlo como perro callejero. Ganaría dinero con él, no había gastado tanto por su cara bonita o por un cuerpo que no le causaba otra cosa que despellejarlo para comérselo.

Un valde de agua dejó caer sobre el chico para que sus ojos se abrieran y así prestara atención a sus "enseñanzas"

- DESPIERTA MOCOSO! -

Una patada hizo saltar aquella cajuela de barrotes que lo mantenía prisionero.
Volver arriba Ir abajo
Huésped
Invitado




Bück dich befehl ich dir [Inclínate, te lo ordeno][Privado, con sado, no entrar] Empty
MensajeTema: Re: Bück dich befehl ich dir [Inclínate, te lo ordeno][Privado, con sado, no entrar]   Bück dich befehl ich dir [Inclínate, te lo ordeno][Privado, con sado, no entrar] I_icon_minitimeJue Sep 18, 2008 10:20 pm

Ni el ser arrastrado, ni lanzado en aquella cama... Nada de eso bastó para hacerle despertar. El cansancio y hambre acomunado durante aquellos días hacia mellas en él y ahora, sencillamente, su cuerpo se veía inerte ante cualquier acción.

Cualquiera si, cualquiera excepto aquella. El agua que le azotó el cuerpo entero le hizo dar un respingo y por consecuente, se golpeó la coronilla contra los hierros de aquel techo que formaba la jaula en la que ahora se encontraba preso.

Abrió de par en par los ojos, mostrando sus azulados orbes. No sabía cómo había llegado a parar allí, pero arrugó su rostro entero cuando el aroma putrefacto de aquel local parecía más insistente en la zona dónde se encontraba. Pronto salió de su ensoñación, el golpe propinado por la punta de la bota del extranjero y el soberano grito que éste soltó con ya apreciado acento le hizo alzar la mirada, encontrándose entonces con el albino.

Se movió entre la estrechez del lugar dónde se encontraba y juró que, aquello que había entre sus nalgas escocía... Fue cuando reparó en su desnudez y cómo si su mente divagase en extrañas conclusiones su rostro se iba tornando cada vez más fiero, sus muecas fueron haciéndose más ofuscadas y gélidas. Aquel tipo comenzaba a incordiarle.

Él no era un perro. No era cómo esos. No había nacido esclavo y no toleraría que le tratasen de una forma tan vejatoria.

Buscó. Su mirada buscó por aquel putrefacto y maculado suelo algo con lo que poder romper a golpe de piedra los barrotes que le impedían la libertad. Lo encontró; Un hueso. Parecía tratarse de un fémur. Estaba a poca distancia de dónde él se encontraba, bastaría con alargar la mano para hacerse con el trofeo, pero la mirada del extranjero permanecía sobre él.

De poco le importó, se movió, cómo pudo hacia ése costado y su mano pasó por entre las separaciones de los barrotes y logró alcanzar el hueso. Si el otro alargaba la mano se lo clavaría; Lo haría.

- ¡Déjame salir o...! - Sin duda, aquel súbito remojón parecía haberle despertado al completo y le agradeció eso.
Volver arriba Ir abajo
Contenido patrocinado





Bück dich befehl ich dir [Inclínate, te lo ordeno][Privado, con sado, no entrar] Empty
MensajeTema: Re: Bück dich befehl ich dir [Inclínate, te lo ordeno][Privado, con sado, no entrar]   Bück dich befehl ich dir [Inclínate, te lo ordeno][Privado, con sado, no entrar] I_icon_minitime

Volver arriba Ir abajo
 
Bück dich befehl ich dir [Inclínate, te lo ordeno][Privado, con sado, no entrar]
Volver arriba 
Página 1 de 1.
 Temas similares
-
» D E P A - T O X [PRIVADO-L E M O N]
» Something I Can Never Have -privado-
» Depa Tox [PRIVADO]
» Un dia raro *Privado*

Permisos de este foro:No puedes responder a temas en este foro.
Zados: La Isla del Pecado :: Zona Residencial :: Zona 0-
Cambiar a: