Con la mirada perdida en la inmensidad del oceano (Lemmon- Moses)

Luego de un rato, Moses introdujo un segundo dedo en Aruan, procurando ser delicado para no dañar al chico, aunque claro, las palabras que profería de ves en cuando debían estarlo dañando más que la intromisión; introdujo un tercer dedo y comenzó a moverlo lentamente, hasta que creyó que el chico ya se había dilatado.

Moses se masturbó un poco y luego le habló al esclavo.-Date vuelta, de manera que quedes al frente mío y siéntate en mi miembro...está esperandote con ansias.-Dijo y jaló del chico para que hiciera lo que ordenaba.

Se estaba comportando de manera poco común y, se estaba descargando con el chico de todas sus frustraciones, las cuales había estado acumulando a lo largo de su vida y ni siquiera con el cilicio lograba extraer de sí mismo, de su instrumento más valioso sólo obtenía sangre que emanaba con furia y le recordaba que a pesar de todo lo que hiciera, jamás podría liberarse de la multitud de pecados que lo consumían.

-Yo y mi miembro nos estamos impacientando.-Dijo como si fueran dos personas que componían un mismo cuerpo.

Cubrió su rostro con ambas manos ,no quería que Moses pudiese ver su expresión cada vez que un nuevo dedo hacia su aparición en la entrada del chico.
No podia parar de pensar en todo aquello que le dijo "aquel" día,que ahora le parecia tan lejano e irreal. Moses le habia dicho que no le tratara a modo de "amo" ,pero en ese momento ,y despues de haberle dicho y demostrado de malas maneras que en efecto le pertenecia,ahora le estaba dando una orden,como hace un amo con su esclavo.

Fué entonces cuando una pequeña lagrima consiguió escapar y recorrió fugazmente la mejilla del chico ,yendo a morir a su mentón.
¿lo habria visto Moses? Aruan esperaba que no,no soportaria una burla o una humillación mas por su comportamiento para con él.
Se limitó a obedecer,despacio pese a las quejas de su amo ,se situó frente a Moses,dandole la espalda y ayudandose con las manos introdujo la punta del excitado miembro en su interior.
Quedó quieto por un instante,volteó para ver a Moses,sus ojos vidriosos le pedían ,suplicantes que al menos no fuese muy brusco con él,y acto seguido comenzó a bajar lentamente,profiriendo un largo gemido que trataba de ocultar cubriendo su boca,hasta quedar ,como su amo le habia pedido ,sentado sobre su ahora palpitante miembro.

El chico hizo todo lo que el otro pedía, sin reclamar, sin poner objeciones, aunque seguramente eso era lo único que deseaba hacer en este momento, por lo que el rubio se sintió aliviado de no tener que ver la expresión en su rostro, que seguramente lo haría perder los estribos nuevamente.

Cuando el esclavo se dió la vuelta para observarlo con una mirada suplicante, Moses pudo ver una lágrima que bajaba por su mentón y lo excitó en sobremanera, en verdad no creía que con el esclavo pudiera aflorar su instinto sádico, pero lo había despertado sorprendentemente.

Moses lo rodeó con sus brazos, mientras se inclinaba hacia adelante, quedando el esclavo tendido sobre la cama y el rubio sobre él, instintivamente se percató que su boca estaba muy próxima a la oreja de Aruan, por lo que este podía sentir los leves gemidos que dejaba escapar Moses de ves en cuando.

Lo penetró lentamente, para que el chico no sufriera tanto con su segunda intromisión, aunque esa posición hacia que estas fueran más profundas, pero luego comenzó a aumentar la velocidad de sus embestidas.

Aruan se sentía tan pequeño e indefenso en manos de Moses,que le movía como si de un muñeco se tratara...

Tendido ahora bocaabajo sobre esas frías sabanas ,podia sentir como ,gracias al lubricante,no estaba siendo tan doloroso como recordaba de su primera vez,aún así Moses le penetraba muy profundo ,haciendo que ,sin remedio los gemidos se escaparan de su boca,aún sin él desearlo.

Podía sentir el cálido aliento de Moses ir a morir a su oido,acompañado de los leves jadeos del mayor,el chico se maldecía a sí mismo interiormente pues sentía que aún habiendole tratado de esa forma,comenzaba a excitarse de verdad,a sentirse bien bajo el cuerpo de aquel hombre al que habia empezado a querer y a temer al mismo tiempo.

Las embestidas eran cada vez mas rápidas y fuertes,al igual que los gemidos de Aruan se volvían mas sonoros y se aferraba a esas sabanas que incluso mordía ,jalando de ellas viendose incapaz de hacer nada mas,solo gemir y gemir.

El rubio sonrió ante la reacción de quien tenía bajo su cuerpo y sin posibildad de moverse, se sentía sádico, ya que disfrutaba en sobremanera el espectáculo, Aruan se veía tan frágil, tierno y delicado que deseaba someterlo a sus pies, aunque hubiera sido a costa de su propia voluntad ya seguramente, luego de que acabasen, le miraría con odio.

Moses estaba pensando en que acciones debería tomar en ese momento, cuando los ojos del chico se vieran vidriosos por las lágrimas contenidas y reflejaran todo la amargura y el odio que sentía en contra de él, quien en un principio, jamás quiso proferirle ningún daño, pero claro, se sentía incapaz de controlar a su "otro yo", que de ves en cuando amenzaba con salir y arruinar todo lo que había construido, en destruir todo el afecto que antes brillaban en los ojos del esclavo.

Comenzó a moverse apresuradamente, por la ansiedad y los gemidos de Aruan, que lo hacían excitarse rápidamente; sentía que pronto se iba a venir dentro de él.

Aunque habia empezado a sentirse bien de algun modo ,era mas fuerte el sentimiento de decepción y desamparo que le invadía,recordó las palabras de Moses en la playa,diciendole que en aquella ocasión hubiese parado si él se lo hubiese pedido,en ese momento Aruan solo pensaba que le habia mentido descaradamente,pues estaba seguro que aunque ahora le suplicara que se detuviera,no lo haría.

Estos pensamientos no paraban de atormentarle ,sintiendo como Moses era mas brusco y rapido cada vez en sus movimientos,no sabía cuanto tiempo mas se tardaría pero el chico no pudo mas, convirtiendo sus gemidos en un amargo llanto,que apareció casi mudo,pero que enseguida se intensificó,mezclandose con los jadeos.
Alzó una mano ,tomando una de las almohadas y abrazandola con fuerza para esconder su rostro lleno de lagrimas,sabia que Moses notaría su estado,pero no queria darle el gusto de verle llorar.

Se odiaba a sí mismo por no haber soportado aquello sin derramar una lagríma como queria desde un principio.
Solo deseaba que que todo pasara,que todo volviese a ser como antes,aunque dudaba que algo así pudiese pasar,pues la opinión que tenia formada sobre su amo estaba cambiando radicalmente.

Moses terminó dentro del chico al ver como sollozaba y agarraba una almohada que lograra esconder sus lágrimas, aunque era completamente perceptible lo que estaba ocurriendo. Rato después de él, Aruan se vino y continuó llorando de una manera que llegaba a desgarrar a todo el que estuviera a su lado o cerca de él, por lo que Moses no tardó en sentirse de esta manera, porque claro, todo esto era su culpa y ahora era el momento de asumir las responsabilidades del caso.

El rubio salió del esclavo con delicadeza y se levantó de la cama, dirigiendose al baño, de donde sacó una toalla y humedeció un poco la punta, luego volvió hacía donde se encontraba Aruan y se dedicó a limpiar su entrada que goteaba semen. Demonios...debí haberme puesto un condón dijo para sí mismo mientras dedicaba movimientos circulares a la piel del esclavo. Luego de un rato, Aruan quedó completamente limpio.

-Debemos a hablar...¿Puedes mirarme, por favor?-Pidió delicadamente Moses, ahora le había sobrevenido toda la culpa correspondiente, ya que había sido un abuso sexual.-Si no quieres hacerlo...voy a usar el cilicio en mí, siempre lo traigo en el bolsillo de la chaqueta.-Dijo tratando de sonar tranquilo.

Apretó la almohada con fuerza al sentir como Moses terminaba dentro de él,invadiendole por completo,todo eso ,unido con el roza contra las sabanas hizo que se viniese también,pero fué un orgasmo totalmente amargo,que no le produjo placer alguno.
Quedó en el mismo lugar,inmovil tal y como estaba sintiendo que Moses se retiraba.

Se hizo un obillo sin podre parar de llorar cuando notó que Moses volvia y le limpiaba.
¿por qué mostraba ahora esas delicadezas con él? Nunca en su vida se había sentido tan confuso.
La voz de Moses tenía un efecto tranqulizador en el chico,algo que habia sido así desde la primera vez que hablaron en Hanori,y al escucharle dejó de llorar lentamente,ahora solo hipaba con la respiración agitada aún,le escuchaba atentamente no pudiendo evitar pensar que le estaba chantajeando,pues por mucho daño que le hubiese hecho,no queria verle sufrir voluntariamente como hacia cuando usaba esa cosa que aún confundía mas a Aruan,pues no podía entender por qué se castigaba a si mismo de esa manera.

Lentamente se incorporó,quedando sentado a pocos centimetrós de donde estaba Moses,ni siquiera se molestó en secar sus propias lagrimas,habia dejado de sollozar,pero algunas lágrimas aún escapaban,resbalando por el húmedo rostro.
En silencio,miró a Moses directamente a los ojos,sin expresión alguna en su rostro,no parecía estar triste,ni enojado,era como si el esclavo no estuviese alli.

El chico lo miró tal como su dueño había pedido, pero sin acercarse demasiado, cosa que a Moses no le causó mucha gracia, ya que era como si Aruan le sacara en cara su error y la inconsecuencia que demostraba con respecto a lo que había dicho anteriormente, e incluso a cuando tuvieron sexo por primera ves en la suite del Hotel, sin embargo le entendía a la perfección, era obvio debido a su intento de sadismo.

-Bueno...empezaré yo.-Dijo agachando un poco la cabeza para luego acercarse más a Aruan, hasta que casi se rozaban sus brazos.-Sé que no vale la pena, porque el daño ya está hecho, pero quería pedirte disculpas por lo que pasó...ahora.-En realidad lo sentía, pero no creía que el chico le creyera tan fácilmente.

-Te prometo que es verdad...jamás te engañaría, lo que más odio es la mentira.-Moses nunca podría mentirle a Aruan, ya que de algún modo le quería, aunque se debatía en él una lucha interna y trataba de borrar todo atisbo de sentimiento de su corazón; ¿Cómo si el amor era un juego podía llegar a sentirlo tan ..real?.

Que hombre tan exasperante y contradictorio.
Aruan reaccionaba secando su rostro con sus antebrazos,escuchando las palabras de Moses tratando de buscar la mejor respuesta que pudiese darle,de pronto pensaba que su amo no deseaba que él se expresara y le dijera lo que pensaba,sino que quería que el esclavo dijese lo que Moses queria oir.

-...Señor Moses - Sí ,le dijo "señor" ,sentia que la confianza que parecia haber entre ambos se habia esfumado- ¿que es lo que quiere?....quiere ....que el perdone?...-su voz temblaba ,sonaba muy bajo,casi como un susurro.-...se sentirá mejor si le perdono?...-comenzaba a esbozar una triste sonrisa,sabiendo que le mentiria,que solo le diria lo que queria oir.-...si,le perdono si es lo que quiere...

-"pero no podré olvidarlo"-pensaba amargamente,secando las ultimas gotas saladas que recorrian su rostro.

Si el otro chico se sentía exasperado, Moses lo estaba el doble, ya que no sabía qué hacer ni como comportarse, aunque a pesar de todo lo que le dijo y le hizo no se arrepintió de nada, si lo hacía no tendría la posibilidad de aprender de esto y además, un poco de Aruan.-No me gustan las mentiras, ni que me trates de complacer de esta manera...ni de ninguna otra desde ahora.-Dijo un tanto triste por la nueva denominación que poseía.

-Mejor me voy a bañar.-Llevó su ropa con él y cerró la puerta del baño, sacando del bolsillo su cilicio, ¿Lo usaría desde ahora?; se lo merecía, claro está, pero no estaba seguro de querer hacerlo.

Al final, se decidió y lo hizo, rodeó su muslo con el instrumento y lo apretó un poco, dejandolo allí mientras se vestía y abría la puerta; trató de caminar normalmente, para que Aruan no se percatara de lo que había hecho, pero le resultaba un poco complicado fingir.-¿Prefieres que nos vayamos?...O deseas comer algo en este lugar.-Dijo intentando sonreír mientras miraba fijamente a Aruan y se apoyaba un poco en la pared más próxima, dejando descansar su pierna.

¿las mentiras?No dijo nada,pero no le habia mentido,no le costaba nada perdonarle,pero eso no borraría lo que había pasado.
Asintió cuando Moses se dirigia al baño,esperó que hubiese cerrado la puerta para levantarse e ir a por sus prendas que estaban por el suelo, pensó que también necesitaba un baño,pues en ese momento se sentia sucisimo,pero no queria permanecer por mas tiempo en ese lugar.
Se vistió en silencio y se sentó en un pequeño sillón que estaba situado junto a la ventana, levantó un poco la cortina para ver el mar en lo que esperaba a su amo.
Seguramente la proxima vez que fuese a la playa recordaría este dia.

Se volvió a su amo cuando le vió salir tensandose un poco ,se fijó en su modo de andar ,saltaba a la vista lo que había hecho.
-La verdad es que quiero salir lo antes posible de este lugar...-le decia frunciendo el ceño,pero con un tono tranquilo.-...pero no creo que deba forzar mucho esa pierna ...-le miró enarcando una ceja.-...ha vuelto a usarlo...¿por que?
No pretendía faltarle al respeto y sabia que no tenia ningún derecho a regañarle por nada de lo que hiciera,sin embargo se sentía culpable de que su amo se castigara con el cilicio.

-Moses...-Le dijo con la vista fija en su pierna-...me odia?...- No quería oir la respuesta,sentia que no habia hecho mas que hacer desgraciado a Moses desde que entró en su vida, antes le trató de una forma que le hizo sentir como si le odiara y de seguro lo haría mas si era el culpable de que se inyectara lo que Aruan pensaba que era algún tipo de veneno.-...es por que no he sido un buen esclavo?...puedo ...puedo tratar de mejorar...

El chico ya se encontraba vestido y con todas las ganas de irse, así que Moses hizo un ademán para que lo siguiera que se nubló debido a que Aruan estaba diciéndole cosas que el rubio no pudo ilar al principio, pero que luego de un rato entendió a la perfección, quizás más de lo que le habría gustado.

-Porque te hice daño y aunque me disculpaste no creo que hayas sido sincero, además de que seguramente cada ves que me mires podré darme cuenta de que aún sientes rencor por lo que te he hecho hoy…Además, rompí mi promesa y te hice sufrir.-Se comenzaba a impacientar ya que hablaba muy rápido, como si fuera la última ves que tendría las facultades de hacerlo.

Moses casi se atragantó con su propia saliva cuando oyó la pregunta de Aruan. ¿Cómo podía llegar a pensar si quiera que el rubio pudiera odiarlo?, bueno, eso era algo irónico, debido a la manera en que lo había tratado hace unos minutos.

-Eres realmente estúpido.-Lo miraba con tristeza pero siempre con la vista fija en los ojos del otro.-No te odio…ni siquiera te he reclamado nada y de hecho, no creo que seas un mal esclavo…estas bien para mí. Ahora vámonos.-Dijo mientras se encaminaba a la puerta y la abría con cierta dificultad.

Caminó hasta la recepción y le entregó la llave al chico que atendía, que nuevamente los miraba extrañado.-Toma.-Le pasó un fajo de billetes.-Para que cierres la boca y sonrías cada ves que venga a este lugar.-Luego se encaminó hacía la puerta.

Era cierto,habia roto su promesa...¿se podí considerar eso como que le habia mentido?
Seguramente sí,por eso Aruan se preguntaba por que le creia todo lo que decia,tal vez porque necesitaba creerle,si decia que no le odiaba,no iba a hacerselo pasar por mentira,así estaba bien.
Pero,¿por qué necesitaba saber algo asi? No debería importarle realmente ,pero aún asi le importaba, hizo lo que parecia un resoplido al levantarse para salir,aunque,realmente era un suspiro de alivio camuflado,por salir de allí,y por las palabras de Moses.

"¿Rencor?"-En la cabeza de Aruan esta palabra se repetia una y otra vez mientras se dirigia a recepción siguiendo a su amo dos pasos por detras de él,como le habian enseñado en Hanori.Moses era lo único que "tenía" en el mundo,nunca había guardado rencor a nadie,tampoco lo haría con él.
Miró algo confuso la escena,se sintió estúpido por no entender lo que ocurría,Su amo parecia molesto aún,¿tal vez sería por el dolor de su pierna?

Al verle yendo a la salida,con ese paso ,casi cojeando,el chico se adelantó,poniendose a su lado y tomando su brazo,pasandolo por encima de sus propios hombros.-Déjeme ser su apoyo,seguro que aun debe de doler...
Aunque Aruan era mas bajo ,podia ser su "bastón" unos cuantos metros o hasta que Moses se sintiera mejor .

Había sentido la necesidad de descargarse con alguien en ese momento, por eso le había dicho ese tipo de cosas al recepcionista, pero el no se quedaba atrás, ya que cuando habían entrado los miró de manera desdeñosa y si, había que pagar, al menos podía estar siempre sonriente, que le importaban a Moses sus problemas.

-Olvídalo.-Dijo tratando de zafarse de él, pero el chico lo había sostenido bien, por lo que si el rubio trataba de moverse, caería y seguramente tendría luego inconvenientes en la pierna.-Recuérdame vendarla cuando lleguemos a casa, por favor.-Dijo haciendo un ademán para que el chico se diera cuenta que se refería a su muslo.-

El auto de Moses se encontraba a unas cuadras de ellos, pero se acercaron a paso lento a él; el rubio se sentía completamente frustrado e inútil, quizás hacerlo en el hostal había sido un poco apresurado pero seguramente cuando llegara a la casa ya se le habría olvidado todo lo que pasó, asi que debía sacar su instrumento allí.

Subieron al auto y se alejaron rápidamente del lugar, esperaba no volver a la playa, que ahora le parecía completamente amarga.

CERRADO