Los negocios, son los negocios -Priv-

Observe al joven mientras el pensaba alguna opcion para mi y entonces acabo invitandome a su casa a tomar cafe.
Tras escuchar sus palabras solte un pequeño suspiro y asenti -comprendo, esta bien... confiare en que tu cafe sea de verdad tan bueno como todos te dicen...- comente cruzandome de brazos.

El camarero se acerco y nos comento si deseabamos algo mas -No gracias, traiga la cuenta- agregue sin mirarlo, pues mi mirada estaba fija en el jovencito de cabellos dorados.

-Estaba todo muy rico gracias…-.Dije sonriendo, y viendo como el camarero se iba.-Siento que tengas que acompañarme…supongo que tienes mejores cosas que hacer…
Eso pareció descolocarle un poco y mire por la ventana, no me gustaba ser una carga para nadie, y menos para mis amigos. Por eso siempre tiendo a alejarme de la gente, mi jefe puede que tuviera razón, aun soy demasiado crio para entender algunas cosas.
-Si tienes algo que hacer con que me acerques a mi casa ya es suficiente…

Solte un suspiro molesto tras escucharle -No seas tonto...me invitas a tu excelente cafe el cual ya tengo ganas de provar y ahora me vienes con esas?- dije con seriedad pero con el rostro relajado -aqui el atareado eres tu al fin y al cabo, yo soy el que no tiene nada que hacer- me encogi de hombros y sonrei de lado -o es que ya quieres librarte de mi y eso es una burda excusa?- alze una ceja dejando los labios ligeramente entreabiertos como a mitad de una sonrisa.

El camarero nos dejo la cuenta y se dispuso a marcharse, mas yo le indique que se quedara y saque un billete de los grandes sin mirar el precio de todo. Este sonrio ligeramente y se marcho de nuevo.

-no no es una excusa para librarme de ti…es que suelo pensar demasiado muchas veces, y supongo que estar con alguien como yo no es divertido…ya que me tienes que enseñar muchas cosas…-.Aunque ahora mismo no estaba para que me enseñaba y notaba un poco que mi garganta me pedía la medicación, cubrí un poco mi boca en auto reflejo, para toser un poco.-Sera mejor irnos ya…
Me puse de pie y recogí el portafolios, acordándome que el abrigo lo había dejado en la oficina de Derek, otro día tendría que ir a recogerlo.
“Vuelvan otro día”-.Escucho al salir, sonrió saludando con la mano y al salir noto ese aire helado y miro al cielo.

-Otra vez la misma cancion...y esa es una cancion que no me gusta nada- respondi de inmediato al escuchar que el no era alguien divertido -si no me resultaras "divertido" como tu dices te habria mandado a tomar por culo hace mucho tiempo- agregue tajante y causa de ese comentario el cual lance bastante sonoro alguien solto un "Mon dieu"
"Malditos franceses como los odio" le respondi mentalmente mirando a dicha persona con frialdad.

Segui al muchacho no sin antes llamar al chofer para que nos llevara en la limusina.

CERRADO