Por fin juntos

Esa sonrisa, no era provoctiva, pero era hermosa, lentamente Obed se acerca y al mismo tiempo se fue desaciendo de la bata hasta quedar completamente desnudo, sus brazos rodean mi cuello y roza mis labios, lo levanto y lo siento sobre la mesa del antecomedor, donde no solo jugueteando con sus labios sino que empiezo a deborarlo hasta saciar mi hambre de ellos, recoriendo su espanda con mis manos, esa provocacion hace que termine por tomarlo de nuevo. me separo solo un instante de el.

Solo me haces querer tomarte aqui en este lugar. Por lo que el descanso el día de hoy se pospondar para otro dia.

Llevo mi mano hasta su pierna acariciandola, mientras regreso a sus labios y seguir deborandolo.

Decia que no era su intención, pero como me provocaba, desnudo, completamente a mi disposición, mucha tentación, pero no podría lastimar mas a mi angel, solo habían pasado unas cuantas horas de haber tenido sexo, mas por ser su primera vez, no quería verlo llorar por sentir dolor.
Seguia comiendolo a besos hasta que lo vuelvo a caargar y llevarlo en hombros dejando la bata de mi angel en el piso de la cocina.

Bueno solo haces que me encienda sabes?? asi que será mejor que nos quedemos acostados todo el día, ademas no quiero que cocines este día, una pizza al rato estara bien. Por ahora quiero que estes conmigo.

Digo mientras llegamos a la habitación y lo dejo en la cama.

Su puchero de reproche era encantador, no me importaba en absoluto el llevarle en brazos, ese delgado cuerpo no me lastimaría en absoluto, todo lo contrario me daban ganas de cargarlo a todos lados si asi quisiera.

Si tu no eres pesado, para nada, mas bien pareces una pluma.

Veo como esconde su cuerpo debajo de la sabana, me hinco sobre la cama y de un tirón le quito la sabana de encima para verle desnudo.

Mmm el haberte traído a la cama no era para que te escondieras bajo las sabanas, si quisiera verte cubierto desde un principio te hubiese puesto la bata que hemos dejado en el piso de la cocina, quiero tenerte asi, sin nada en cima.

Me quito la bata y la dejo a un lado, me acomodo sobre el tomando sus piernas y levantandolas un poco, empiezo a lamer desde sus dedos hasta su entrepierna de manera lenta y suave disfrutando cada lamida y el sabor de Obed.

El estremecimiento de Obed me provoca a un mas, y verme ya entre sus piernas justo por encima de su miembro que empezaba a despertar, sigo lamiendo no terminaría hasta verle satisfecho, por que esa pequeña erección no se quitaría así de facil, necesitaba atención y yo justamente eso le daría, aunque la idea de penetrarle estaba fuera de la lista.
Dejo de lamerle para saber lo que quería decir mi angel.

Que quierias decir??

Me acerco a el y le beso de manera pasional, disfrutando de su lengua que aun no estaba acostumbrada a mi intrución.

Obed quería mas, ya que le estaba provocando, pero el mas a mi, entonces que podría querer?
Al menos yo ya deseaba mas que solo caricias y jugueteos, me había provocado a tal punto de querer penetrarle de nuevo y disfrutar de su estreches. Me rio un poco aun teniendo mi rostro sujetado por las dulces manos de Obed.

Entonces pasemos al plato fuerte mi angel. ya que tu me has provocado y despertado en mi lo que quería evitar este día de descanso, pero creo que el descanso llegara despues de haberte tomado.

Agarro una de sus muñecas para alejarla de mi cara y regresar a sus labios de manera suave, ya que de manera desenfreanada no disfrutaría de sus boca y lengua, depues quilo la otra mano de mi rostro y sostengo ambas muñecas con una mano sobre su cabeza.

Obed estaba de seoso de mas, lo noto al querer rozar mi miembro de manera inpetuosa con el suyo, por lo que ya quería tenerme dentro suyo, y no le haría esperar mucho, me salto toda la serie de caricias y paso directo a su estrado para poder lamer y tenerla u poco mojada antes de entrar en el, en mi cabeza rondaba el hecho de comprar despues un buen lubricante.
Ya sentía que estaba bien mojado, entonces abro sus piernas y levanto su cadera un poco.

Te volvera a doler un poco, pero trata de resistir, ambos queremos esto y creo que ya no hay marcha atras.

Se que lo ultimo no era reconfortante, pero era cierto, de un empujon lento y tratando de ser suave, le penetro completamente. Soltando un gemido grave. Sostengo bien su cadera, no empezando hasta saber que Obed se encontrara bien.

El cuerpo de Obed se tensa, siento como sus musculos de su interior tambien ejercen cierta tension, Suelto sus piernas dejandolas descansar sobre la cama, mientras me inclino hasta el y ver como sus lagrimas recorren sus mejillas, eran de dolor, pero no se quejo, estaba aguantando, me acerco a sus ojos besnadolos y limpiandolos de aquellas lagrimas, le veo fijamente.

Te duele cierto? Dime si quieres que pare, no quiero lastimarte.

Le abrazo con fuerza para reconfortarlo un poco.

Mi pequeño niega que sienta dolor aun que se que lo siente, no obstante el quería mas, de verdad me deseaba y por cupuesto yo a el.
Sus piernas delgadas hacen que me acerque mas a el al igual que la penetracion sea mas profunda, le beso fuerte mente casi arrebatandole el aire. Rompoe el beso al ver como Obed respiraba con dificultad, doy un ultimo beso suave, antes de acomodarme mejor y empezar a moverme con cierta lentitud.

Estas bien???

Preguntando, serciorandome de no lastimar a Obed.

Esos cortos besos me daban a entender que ya no molestaba tanto, por lo que mis movimientos empezaban a ser mas constantes, tanto era mi excitacion que tomo a Obed de las piernas levantandolas por arriba de mis hombros, para que la penetracion fuera completa, al mismo tiempo sosteniendo sus muñecas y jalarlo a mi en cada embestida.

Gime.. quiero escuchar tu voz, quiero escuchar mi nombre en tus labios.

Mi nombre era pronunciado por fin por Obed, me facinaba, me gustaba escucharlo gemir, y claro estar dentro de el, en cada embestida escuchaba sus gemidos hasta oir que quería mas, sueltos us muñecas y sostengo su cadera con ambas manos para que las embestidas fueran mas profundas, aumentando cada vez mas la velocidad, me gustaba, sentía en cada embestida cierto rose con la prostata de Obed, quería oirle gritar con mas fuerza. Solo de mi boca salian gemidos roncos y profundos, al mismo tiempo que el nombre de Obed en tan solo un susurro.

Los gemidos de Obed me exitaban a cada momento, sus piernas temblorosas y su entrada que no me permitía la salida ni por error me facinaba, su rostro con algunas facciones de dolor pero al mismo tiempo con excitación, todo el me gustaba, pensaba en la ultima vez que disfrute de estar con alguien así, y lo primero que viene a la mente es ¨él¨, pero lo olvido a escuchar de nueva cuenta a mi angel suspirar, gemir y escuchar mi nombre salir de su boca. Yo estaba muy excitado casi para poder correrme dentro de el, pero no quería hacerlo solo, quería a Obed, quería oirlo gritar al llegar al extasis junto conmigo. Por lo que salgo subitamente de el y lo pongo bocaabajo en cuatro y empezar a masturbarle un poco antes de arremeter en el con mas fuerza y rapidez.

Quiero hacerte gemir, quiero que tu llegues al extasis junto conmigo. Hacernos completamente uno.

Digo a Obed cuando mis movimientos y la masturbación iban de igual ritmo.

Por unos instantes se sintió fuera de si, cada vez que era llenado por las empaladas del mayor. Cada una era una pequeña vibracion de placer, amor, dolor, todo junto y mezclado... Por el momento las embestidas aunque salvajes, le mantenían gimiendo fuertemente, pero entonces sintió como en su interior el miembro del mayor se movía aun mas rápido ya que resbalaba por los fluidos de ambos... era evidente que el placer se agolpaba.
A duras penas se dio cuenta cuando el mayor salió de él, y ya iba a protestar al no sentir la subsecuente embestida que deseaba, y se dio cuenta luego que el mayor le había puesto boca abajo, pero esta vez no agachó el torso sino que quedó apoyado sobre las palmas de sus manos y sus rodillas bien separadas, sintiendo como el mayor volvia a ponerle ritmo a su pasión, el ritmo que tanto deseaba.

Luego de oír al mayor mientras volvían los gritos implacables y gemidos ansiosos solos pudo responderle entre estos...
- Aah... s-si... yo tam...biennNh!!.. Freh... te am... Aaah!! - pero por mas que anhelo terminar aquello que estaba en su mente cada embestida le dejaba en blanco y le hacia gritar o gemir, sintiendo como su entrepierna ya le dolía, por que el tambien se estaba aguantando para tener aquel climax juntos como la primera vez...

Ya era insoportable esperar mas tiempo, me inclino sobre el para hablarle al oido.

Hara hagamoslo juntos, quiero llenarte de mi, quiero sentirte, quiero oirte llegar al climax y escuchar en alto mi nombre.

Cada embestida que le proporcionaba era fuerte rapida, mi miembro estaba completamente hinchado, necesitaba llenarle y sentirme satisfecho, finalmente me corro dentro de Obed, jadeando y gimiendo roncamente de igual manera sientiedo como su semen se desliza en mi mano, estaba caliente, paso mi manos obre su miembro hasta sus testiculos, masajeando un poco para que se sintiera un poco mejor, dejando algunas manchas en el y finalmente pasar mi mano sobre mi lengua para saborear el delicioso nectar de su interior.

Delicioso, eres delicioso Obed. mi Obed.

Digo mientras me recargo sobre su espalda y beso su cuello.